Las alertas y preocupaciones sobre las condiciones de los refugios para migrantes en Chicago se hacen presentes, luego de la muerte de un menor de 5 años y las múltiples enfermedades detectadas en otros pequeños.
Los médicos de la zona han mostrado su preocupación ante la precariedad médica en los sitios que se han destinado para albergar migrantes.
Añadiendo que muchos de los extranjeros llegan a EEUU con enfermedades crónicas o algunos padecimientos que generaron durante su travesía, que van desde infecciones hasta experiencias traumáticas.
Precariedad médica en los refugios para migrantes en Chicago
Jean Carlos Martínez, de 5 años, vivía en un albergue del barrio Pilsen en Chicago, ahí tuvo una emergencia médica, y murió poco después de llegar al hospital infantil Comer.
Esta semana y en ese mismo refugio, otros 6 residentes del albergue (cuatro niños y dos adultos) tuvieron que ser hospitalizados.
Las autoridades han descartado un brote en el refugio, no obstante, han aparecido enfermedades en otros albergues como varicela y fiebre aftosa humana.
Por el invierno, los médicos están cada vez más preocupados por el VRS (virus respiratorio sincitial) y el COVID-19.
De acuerdo con la médica, Evelyn Figueroa, en el refugio de Pilsen se alojan aproximadamente 2 mil 300 personas.
El espacio solo cuenta con unas 10 habitaciones de aislamiento para cuando la gente se enferma.
No obstante, funcionarios afirman que se evalúa a cada persona para determinar si tienen problemas de salud cuando se les aloja en los albergues.
Y que la ciudad se ha asociado con dos organizaciones para proporcionar atención médica semanal en los refugios.
Agregaron que en 2022, en el condado de Cook, abrieron una clínica exclusivamente para migrantes y que hasta 100 pacientes al día reciben atención por: vacunas, problemas de salud rutinarios como erupciones cutáneas, atención dental o problemas de salud mental.
La clínica ha atendido a más de 18 mil pacientes en total.
Los refugios los administra la empresa privada, Favorite Healthcare Staffing, la cual, según las autoridades municipales, proporciona atención médica básica y llama a las ambulancias.
En el refugio de Pilsen, una organización de Chicago ha prestado asistencia médica algunas horas a la semana.
Refugios con múltiples precariedades
Chicago ha dejado de usar aeropuertos y estaciones de policía para situar a los migrantes.
Sin embargo, su forma de utilizar los albergues (que van desde casas de campo administradas por el distrito de parques hasta espacios comerciales) también ha desatado críticas.
En estos albergues, los migrantes se han quejado de:
- Calefacción defectuosa
- Fugas de agua
- Alimentos caducados
- Condiciones de hacinamiento a las que no puede acceder el público, periodistas y voluntarios que prestaron atención médica en las comisarías.
En el último año, más de 26 mil migrantes han llegado a Chicago, 14 mil de ellos están en refugios, sin embargo, la ciudad estableció un límite de 2 meses para la estadía en ellos, la primera tanda de desalojos entrará en vigor en enero.
La ciudad se ha quedado sin más lugares para instalar nuevos refugios, por lo que especialistas están preocupados por que más migrantes acaben de nuevo en las comisarías o en la calle.
Con información de Voz de América
