Las redadas digitales contra migrantes ya empezaron en Estados Unidos, según denunció la Unión Americana para las Libertades Civiles (ACLU). Las autoridades migratorias usan datos de localización, obtenidos a través de los celulares, sin una orden judicial.
La documentación que obtuvo ACLU muestra la adquisición de datos sobre la localización de personas, para lo que se necesitaría una orden judicial, según Shreya Tewari, de ACLU.
Cabe destacar que la Oficina de Aduanas y Protección de Fronteras (CBP), el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) y otras agencias, dependen del Departamento de Seguridad Nacional (DHS). Y recolectan información de las llamadas de aplicaciones en teléfonos inteligentes.
Las autoridades de inmigración recurren a los celulares para determinar la ubicación de las personas migrantes que están a la espera de una audiencia en tribunales para determinar si permanecerán en el país o no.
¿Cómo obtienen los datos para las redadas digitales contra migrantes?
El gobierno estadounidense compró acceso a la información de localización de teléfonos celulares. Venntel y Babel Street son los vendedores de datos con los que hicieron el trato, según la unión.
La ACLU obtuvo la documentación a través de una gestión bajo la Ley de Libertad de Información. Descubrió los intentos de las compañías y del gobierno por “racionalizar esta venta irrestricta de cantidades enormes de datos”.
El Tribunal Supremo de Justicia se pronunció por la protección de datos parecidos a la localización por celulares contra el acceso gubernamental sin una orden judicial. El historial de ubicación de un teléfono celular revela la vida privada de las personas.
Esta nota se hizo con información de EFE.
