Existe un debate sobre si acoger o no a las niños migrantes no acompañados en la frontera entre Estados Unidos y México. Ron DeSantis, gobernador de Florida, de fe católica, y el miembro de mayor rango de la Iglesia católica en Florida tuvieron una discusión al respecto.
Thomas Wenski, arzobispo de Miami, y otros líderes religiosos le han pedido al gobierno de Florida reconsiderar su postura. Puesto que se aprobó una orden que suspende las renovaciones de licencias estatales para albergues que reciben a niños migrantes no acompañados. Además, aseguran que estos menores son vulnerables.
Por su parte, Ron DeSantis ha dicho que quiere terminar el tráfico de personas y señala al gobierno federal de no combatir la inmigración irregular.
Este debate tomó importancia cuando una portavoz de DeSantis publicó un comentario de Wenski durante una conferencia de prensa. Afirmó que el gobernador se refirió a los niños migrantes que se presentan sin compañía como “repugnantes”. Sin embargo, el gobernador no dijo eso.
“Mentir es un pecado”, publicó en Twitter Christina Pushaw, secretaria de prensa de DeSantis. Esto desató varias respuestas en internet.
Niños migrantes y la política migratoria de Florida
Aunque la política migratoria del gobierno federal pueda ser “caótica”, Florida debe ser “magnánimo” con los migrantes, especialmente con los menores. Asimismo, Wenski resaltó que la medida de DeSantis cerraría un albergue gestionado por las Caridades Católicas de la Arquidiócesis de Miami. Originalmente, se creó para dar atención a refugiados cubanos menores de edad.
También argumentó que los menores que llegan de Honduras, Guatemala y El Salvador no son diferentes a los cubanos que enviaron sus padres. Por otro lado, la semana pasada DeSantis participó en una mesa de debate con simpatizantes cubanos y rechazó las comparaciones.
“Francamente, comparar lo que está sucediendo en la frontera sur con el tráfico de personas a gran escala, los ingresos ilegales, las drogas y todas estas cosas con la Operación Pedro Pan es repugnante. Está mal, no está ni de cerca de ser lo mismo. Ellos estaban escapando de una dictadura comunista que los perseguía. Esos no eran inmigrantes ilegales”, dijo DeSantis.
Con información de Los Angeles Times.