Los migrantes mexicanos muertos en el tráiler en Texas habían pagado un viaje VIP a los coyotes. El paquete incluía cervezas de cortesía, casas de seguridad con videojuegos y hasta una semana de estadía en un rancho de cacería, según Milenio.
La familia de Pablo Ortega y Julio López, dos de los migrantes mexicanos que pagaron el viaje VIP para ir a Estados Unidos, aseguró que los coyotes cumplieron con una parte de su promesa. No los hicieron pasar por el desierto a pie.
Julio López pagó 12 mil dólares a los coyotes, quienes le prometieron que el viaje sería muy seguro, según dijo su esposa Adriana González. Esta es una cifra mayor a los 7 mil dólares que pagan en promedio los migrantes mexicanos.
Migrantes mexicanos se despiden de sus familias antes de subir al tráiler en Texas
Incluso, ambos migrantes enviaron fotos y videos a sus familias de cómo los trataban. Julio envió un video a la madre de sus hijos desde un rancho de cacería en Nuevo Laredo, Tamaulipas, y le aseguró que estaba bien.
Al llegar a una casa de seguridad en Texas, en Estados Unidos, Julio se despidió de su familia porque le quitarían el celular para seguir el camino.
Ortega mandó una foto desde una habitación comiendo pizza y tomando cerveza mientras jugaba videojuegos. Su madre vendió una casa rodante para pagar los 13 mil dólares para no poner en peligro la vida de su hijo.
Además, pagó 2 mil dólares extra para llevarlo a un área más segura. Su madre empeñó sus joyas con tal de apoyar a su hijo; sin embargo, le pidió que no se subiera al tráiler porque “se acaba el aire”.
Coyotes no cumplieron con el viaje VIP
El pasado 27 de junio, los dos mexicanos subieron a un tráiler en Texas en el que murieron asfixiados junto a otros 51 migrantes. En ese momento terminó su “viaje VIP”.
Una vez que se dio a conocer la noticia sobre la tragedia en Texas, los coyotes hablaron con la esposa de Julio y le dijeron que él estaba bien. Hasta el 5 de junio lo identificó por una fotografía.
Por su parte, la mamá de Pablo llamó a los coyotes varias veces hasta que bloquearon su número. Después viajó a Texas para identificar el cuerpo de su hijo.
Esta nota se hizo con información de Milenio.