Este lunes, en la Suprema Corte se discutirán las medidas contra los migrantes indocumentados al tratar de excluirlos del conteo de población con el que se asignan distritos de la Cámara de Representantes.
Al menos tres tribunales federales alrededor de Estados Unidos han bloqueado el plan de Gobierno de Trump. Esto significa un cambio sin precedentes con repercusiones millonarias para los estados donde viven estos migrantes.
En septiembre pasado, un tribunal federal de Nueva York dijo que la orden de Trump de julio viola las “responsabilidades constitucionales” del Ejecutivo estadounidense.
“Contar el número completo de personas en cada estado y repartir los miembros de la Cámara de Representantes entre los estados de acuerdo con las cifras respectivas”, según el tribunal de Nueva York.
Los jueces de California y Maryland emitieron fallos similares. Por lo que la Administración decidió recurrir al Tribunal Supremo después de su derrota en Nueva York.
Tras la presión de la Casa Blanca, la Máxima Corte decidió acelerar su revisión sobre el plan que quiere dejar fuera del conteo a los cerca de once millones de indocumentados.
El Tribunal tiene una mayoría conservadora. Incluidos tres magistrados designados por Trump. En una audiencia de 80 minutos, se escuchará el argumento oral.
En Estados Unidos, por mandato constitucional el censo se realiza cada 10 años. El propósito es contar a todas las personas presentes en el país.
Finalmente, de aplicarse la orden de Trump, los estados de California y Texas podrían perder la representación en el Congreso. Debido a la pandemia, la Oficina del Censo va retrasada en su tarea de entregar las cifras finales. En 2019, el gobierno de Trump perdió una batalla legal sobre este tema.
Con información de EFE.