Ricardo es un hombre de origen colombiano quien, al igual que mucho otros migrantes, fue víctima de extorsión por autoridades de este país mientras viajaba en camión, a pesar de contar con la visa de residencia para vivir en México.
Desde las instalaciones del Centro Binacional de Derechos Humanos, aseguró que la unidad de transporte fue detenida en tres ocasiones por autoridades que exigieron dinero a los pasajeros.
¿Cómo ocurre la extorsión a migrantes?
Contó que en cada parada, elementos del Instituto Nacional de Migración (INM), el Ejército Mexicano y la Fiscalía General de la República (FGR) lo despojaron de un aproximado de 30 mil pesos.
El hecho ocurrió el pasado viernes 10 de noviembre en el trayecto entre Sonora y Mexicali. De acuerdo al afectado, no pudo ver el rostro de los uniformados ya que portaban pasamontañas.
“Me amenazaron, me bajaron del bus y me hacían a un lado diciendo que si no pagaba me iban a perder, solo querían dinero”, relató.
Desde hace dos años, Ricardo se estableció en la ciudad de Playas de Rosarito, en Baja California donde vive con su familia.
Hoy en día teme por su vida y la de su familia ya que le preocupa sufrir represalias, además de que no quiere interponer una denuncia formal pues no confía en las autoridades locales.
No hay confianza en las autoridades
Al respecto, el director del Centro Binacional de Derechos Humanos, Víctor Clark Alfaro, señaló que, como Ricardo, esta historia se repite continuamente.
“Los migrantes no denuncian, son casos que no sabemos. Resulta frustrante porque uno no puede pedirle al migrante que detenga su camino para un asunto burocrático”.
Por otra parte, comentó que es la primera vez que conoce un caso en que un migrante ya establecido en la región pase por una situación de este tipo.
Lamentó que ninguno de los tres niveles de gobierno actúe con firmeza para defender los derechos y la seguridad de las personas desplazadas.