Han pasado casi dos años desde que se dio a conocer la nueva enfermedad de Covid-19, y más de año y medio desde que el mundo se vio confinado debido a la pandemia. Con el virus aún circulando e infectado a millones de personas, es normal la aparición de nuevas variantes.
Además, con la mitad de la población en todo el mundo aún sin vacunarse, el surgimiento de nuevas cepas es algo que puede esperarse. Es así que el virus del Covid-19 no se seguirá desarrollando de la misma manera en la que lo ha hecho hasta ahora.
Hasta ahora conocemos la existencia de más de 10 variantes del coronavirus, siendo las más conocidas:
- Delta.
- Mu.
- Alpha.
- Lambda.
La variante delta es una de las más propagadas y es dos veces más contagiosa, según estudios de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés). Adam Lauring, experto en virus y enfermedades infecciosas de la Universidad de Michigan, afirmó lo siguiente:
“Hemos visto una etapa de rápida evolución del virus. Ha estado cosechando la fruta madura, pero no hay una cantidad infinita de cosas que pueda hacer”.
El Covid-19 podría seguir mutando en nuevas variantes
Aunque es posible que el Covid-19 se vuelva mas peligroso y mortal, no hay motivo evolutivo para que esto suceda. Además, el surgimiento de nuevas cepas y variantes no significa que estas serán más contagiosas o peligrosas. Es poco probable que las personas más afectadas y que enferman gravemente tengan contacto con otras y transmitan el virus.
Actualmente, médicos y epidemiólogos estudian si las nuevas variantes de Covid-19 pueden ser más resistentes ante las vacunas que se desarrollaron. Mientras más gente se haya vacunado, el virus tendrá que mutar para poder propagarse entre personas con cierto nivel de inmunidad.
Si el virus muta para poder contagiar y enfermar a personas vacunas, los científicos podrían recomendar actualizar regularmente las vacunas, como ocurre con las de la gripe.