La Agencia de la ONU para los Refugiados, ACNUR, está tomando una serie de medidas para responder ante el Covid-19 y no dejar atrás a las personas refugiadas y migrantes. El actor Luis Gerardo Méndez se unió a este llamado de solidaridad.
“A lo largo de mi carrera, me he involucrado con muchas organizaciones y en varias ocasiones. Me han interesado proyectos que no tienen tanta atención mediática. Este me conmovió mucho porque me pareció irónico no pensar que un país como México podría ser una casa para los refugiados sirios”; dijo Luis Gerardo Méndez, embajador de buena voluntad de Proyecto Habesha.
Ante la emergencia por #Covid19, @LuisGerardoM se une al llamado de solidaridad de ACNUR México y un conjunto de organizaciones socias para no dejar atrás a las personas refugiadas y migrantes. @HabeshaP
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— ACNUR México (@AcnurMexico) March 31, 2020
El 26 de marzo, ACNUR pidió 225 millones de dólares como parte de un llamamiento más amplio de las Naciones Unidas, enfocado en un grupo prioritario de países que requerirán acciones específicas.
Pese a que el número de casos confirmados por Covid-19 entre las personas refugiadas es bajo; más del 80% de la población mundial de refugiados y migrantes viven en países de ingresos bajos o medios, por lo que necesitan apoyo urgente.
Por ejemplo, muchos refugiados viven en campamentos muy poblados o zonas urbanas más pobres que cuentan con una infraestructura de salud, instalaciones de agua, saneamiento e higiene inadecuadas.
“Nuestra principal prioridad en la crisis del Covid-19 es asegurarnos de que las personas para quienes trabajamos estén incluidas en los planes de respuesta y estén debidamente informadas; al tiempo que apoyamos los esfuerzos de preparación y respuesta de los gobiernos donde sea necesario”, dijo Filippo Grandi, Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados.
Filippo Grandi aseguró que no escatimarán en esfuerzos para ayudar y proteger a los refugiados de la mejor manera posible en estas difíciles circunstancias.
Medidas que está tomando ACNUR:
- Reforzar los sistemas y servicios de salud y de agua y saneamiento, incluso mediante la distribución de jabón y mejor acceso al agua.
- Apoyar a los gobiernos en la prevención de contagios y en la respuesta sanitaria. Incluso, mediante el abastecimiento de equipos y suministros médicos.
- Distribuir materiales para el cobijo y artículos de ayuda básicos.
- Brindar orientación e información sobre las medidas de prevención.
- Ampliar la asistencia en efectivo para ayudar a mitigar el impacto socioeconómico del Covid-19.
- Mejorar el monitoreo y las intervenciones para garantizar que se respeten los derechos de las personas desplazadas forzosas.
