Decenas de migrantes haitianos acampan en la Plaza Giordano Bruno, en la alcaldía Cuauhtémoc de la CDMX, mientras esperan ser atendidos en la Comar o su cita de CBP One para continuar su viaje hacia Estados Unidos.
Los extranjeros duermen en la plaza a causa de la saturación que hay en los albergues de la ciudad, y no pueden trabajar, pues necesitan la tarjeta de visitante por razones humanitarias, pero al aceptarla tendrían que quedarse en México mínimo un año, y la mayoría quiere llegar al país vecino.
Sin trabajo, sin dónde dormir y con quejas de vecinos es su pan de cada día
Izaac es el nombre de uno de ellos, nació y creció en Haití, sin embargo la pobreza en su país lo orilló a dejarlo. Primero emigró a Chile, en dónde trabajó 8 años como soldador, tuvo una mujer y una hija.
Todo parecía marchar bien, hasta que “sucedieron problemas” como los llamó él, por segunda ocasión tuvo que emigrar, ahora está en México.
Izaac contó la difícil situación que vivió para llegar a tierras aztecas, tuvo que cruzar la peligrosa zona del Darién y con sus propios ojos vio como migrantes de todas las edades “no lo lograron”.
Muchos de sus compatriotas fallecieron en aquella peligrosa ruta.
Llegué a México y ahora ¿Cómo sobrevivo?
El hombre de 35 años mencionó que vivir en la capital es muy caro, y aunado a esto, se suma la falta de respuestas por la autoridades, pues no les resuelven nada.
Ellos solo necesitan aquel documento, el que les permite transitar libremente por México y además poder trabajar, cabe señalar que la mayoría de los migrantes desean llegar a Estados Unidos.
Pero en lo que esperan sus citas de asilo mediante CBP One, tienen que estar en territorio mexicano. El tiempo no se puede determinar, por lo que ellos buscan algo que hacer para sobrevivir en lo que esperan.
Vender comida o hacer trenzas
Al preguntarle a Izaac cómo le hacen para sobrevivir sin conocer a nadie, sin ayuda del gobierno, él respondió que los pocos recursos con los que cuentan se los envían familiares que están en Haití o en otros países.
Este dinero lo ocupan para comprar artículos, las mujeres haitianas son buenas cocinando, por lo que día a día preparan comida que después venden a los transeúntes que pasan por la calle Roma o aledañas en la colonia Juárez.
Y no lo es todo, también saben peinar, así que elaboran trenzas a cambio de unas monedas, con ellas pueden solventar algunos de sus múltiples gastos.
Llega el frío, llegan más problemas
El año se acaba y el frío no espera, está situación también alarma a las decenas de personas migrantes que duermen en la Plaza Giordano Bruno.
Izaac señaló que en las noches es cuando más extranjeros se pueden ver, pues muchos de ellos buscan un refugio para pasar las largas y frías noches.
La mayoría de los migrantes llegan con apenas unos pares de zapatos y algunas playeras, que por supuesto no cubren en lo absoluto.
Más problemáticas: los vecinos de la Colonia Juárez
Sumando a todos los problemas por los que están pasando los extranjeros se añaden, las quejas de los vecinos. Estos últimos días han solicitado al gobierno federal que el campamento sea removido.
Tal como se escuchó este miércoles 15 de noviembre durante una reunión de vecinos en la calle Roma, encabezada por Ana González, representante COPACO.
En ella expusieron diferentes puntos de vista, formas de pensar, con respecto a los grupos vulnerables que allí se asientan.
Los vecinos mencionan que no están en contra de ellos, solo piden que sean atendidos o bien que les otorguen un lugar para que puedan refugiarse y así liberar la calle en dónde están instalados.
Aunque también hubo opiniones divididas, algunos de ellos se quejaron de la basura, los animales rastreros y el “foco de infecciones” que puede haber.
Peticiones de los habitantes hacia el gobierno
Los habitantes de esta colonia solicitaron lo siguiente:
Que Sandra Cuevas, alcaldesa de Cuauhtémoc y Martín Batres, jefe de gobierno dejen de lado sus diferencias políticas y trabajen en conjunto para reubicar a los grupos vulnerables que se concentran en la calle Roma, en la colonia Juárez.
A la vez piden que está reubicación se haga respetando y velando los Derechos Humanos de las personas que ahí habitan, especialmente de las niñas, niños, adolescentes y migrantes.
