Este martes, la Suprema Corte de Estados Unidos dictaminó que los deportados que regresen a Estados Unidos en busca de protección humanitaria serán detenidos mientras el gobierno estudie sus caso.
Cabe destacar que el caso hace referencia a un grupo de salvadoreños que cuestionaron sus órdenes de detención. Ellos tenían miedo de que los torturaran en su país. Sin embargo, la decisión ocasionó una complicada interpretación de las leyes de inmigración.
Este es el caso de María Angélica Guzmán Chávez, quien pidió asilo, pero se lo rechazaron. Después la deportaron y ella decidió reingresar de forma ilegal a Estados Unidos. Por lo que la detuvieron.
Otro de los demandantes, originario del Salvador, afirmó que después de que lo deportaron de Estados Unidos fue blanco de amenazas de pandillas. Asimismo, otros participantes en el caso dijeron que si los deportaban corrían riesgo de persecución y torturas.
Esta decisión de la Suprema Corte de Estados Unidos puede poner en riesgo la situación de otros migrantes a quienes les rechazaron su solicitud de asilo. Luego los deportaron y volvieron al país con la intención de reiniciar sus solicitudes.
“Esos extranjeros no tienen derecho a una audiencia sobre la libertad bajo fianza”, sostuvo el juez Samuel Alito, quien revocó el dictamen en un Tribunal Federal de Apelaciones en Virginia.
Podrán detener a los migrantes deportados que regresan ilegalmente a USA
El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) tiene las facultades de arrestar y mantener detenidos a migrantes que están a la espera de una decisión sobre su deportación. Además, durante esa detención pueden solicitar la libertad condicional o bajo fianza.
Sin embargo, si los deportados a su país de origen quieren regresar a Estados Unidos, entran de manera ilegal y los encuentran, de nuevo estarán bajo la orden de deportación.
“La mayoría estima que la ley permite que el gobierno niegue las audiencias de fianza durante el período de trámite de deportación de 90”, agregó el juez Samuel Alito.
El fallo de la Suprema Corte estuvo respaldado por John Roberts, presidente del Tribunal Supremo. Así como los jueces Brett Kavanaugh, Amy Coney Barrett, Clarence Thomas y Neil Gorsuch. Por su parte, los jueces Stephen Breyer, Sonia Sotomayor y Elena Kagan no estuvieron de acuerdo con la decisión.
Con información de EFE.
