Kristin Graziano, la nueva alguacil del Condado Charleston, en Carolina del Sur, canceló la colaboración con el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) a través del programa de deportación 287(g).
El pasado martes, la alguacil dio una conferencia de prensa en una taquería local. En su primer día en el cargo, Graziano firmó la resolución con la que finalizó el acuerdo de colaboración de este programa de deportación con ICE. Según sus cálculos, el programa afectó a unas 2 mil 500 familias en los tres últimos años.
“Queremos que las personas puedan creer que pueden acudir a nosotros, cooperar con nosotros, cuando son víctimas de un delito en nuestra comunidad. Nuestra comunidad de migrantes actualmente no tiene esa confianza en nosotros. Eso termina hoy conmigo”, dijo Graziano.
Asimismo, la alguacil afirmó que en los últimos años el programa había supuesto millones de dólares de los contribuyentes. En promedio, unos 4 millones anuales de fondos estatales. El objetivo era detener mayormente a indocumentados no violentos.
Durante su campaña, la alguacil de Carolina del Sur prometió terminar con el acuerdo en caso de ganar las elecciones del pasado 3 de noviembre. Derrotó a Al Cannon, el aspirante a la reelección en el cargo, quien se inclinaba por mantener vigente el programa.
El programa de deportación 287 (g) es una sección de la ley migratoria vigente, la cual permite a los gobiernos locales recibir fondos federales. El fin es entrenar agentes para realizar funciones propias de la agencia federal, tal como verificar el estatus legal de los detenidos o entregarlos a ICE en caso de que sean migrantes indocumentados.
Con información de EFE.