En caso de que quieras volver a México de forma definitiva y traer contigo tus ahorros, debes saber que algunas opciones son mejores que otras a la hora de realizar un envío de dinero.
Aunque México y Estados Unidos tienen acuerdos para impedir que los contribuyentes paguen impuestos que ya cubrieron en el otro país, existe un límite de dinero que una persona puede llevar al cruzar la frontera.
El límite de dinero que puedes tener al cruzar la frontera es de 10 mil dólares; si llevas más, estás obligado a declararlo al SAT. Si no lo haces, deberás pagar una multa de entre el 20% y el 40% sobre la cantidad del monto permitido.
En caso de que lleves más de 30 mil dólares, serás sancionado con pena de 3 meses a 6 años de prisión. Todo el excedente será decomisado a menos que demuestres el origen lícito de los recursos.
Cabe aclarar que la declaración solo es para demostrar el origen legítimo del dinero, es decir, que lo ganaste con tu trabajo.
Entonces, ¿qué opciones conviene para realizar un envío de dinero a México y traer mis ahorros?
De acuerdo con Lorena Cortés, fundadora de TaxRepublic, una de las mejores opciones para realizar un envío de dinero es una transferencia por cable.
La especialista explicó que este tipo de transferencias permite a las personas enviarse dinero de una cuenta a otra. Para ello, lo único que necesitan es elegir un banco en EE.UU. que ofrezca este servicio y tener una cuenta bancaria en México.
Los cargos y límites de este servicio dependerán de tu tipo de cuenta y el tipo de transferencia por cable.
Sin embargo, en México las instituciones bancarias están obligadas a reportar ante el SAT los depósitos superiores a 15 mil pesos.
Esto quiere decir que el Servicio de Administración Tributaria (SAT) está al pendiente de todos los movimientos superiores a 750 dólares.
¿Qué pasa si envío mis ahorros a un familiar como si fueran remesas?
Aunque ninguna ley indica que las remesas están sujetas al pago de impuestos, esto no significa que las personas no deban declarar impuestos.
Como las remesas cuentan como donativos, las siguientes personas NO deben pagar impuesto por recibirlas:
- Familia directa, cónyuge, padres e hijos de la persona que las envía.
- A familiares indirectos, siempre y cuando no se envíen a un tercero.
El segundo punto solo aplica si el valor de las remesas recibidas en un año no excede tres veces el salario mínimo general del área geográfica del contribuyente en un año.
Sin embargo, si las remesas exceden los 600 mil pesos en un año, el familiar tiene la obligación de declararlos al Servicio de Administración Tributaria (SAT).
