Nataly Morales es una migrante mexicana que estudió un posgrado en la Universidad de Harvard. Durante su graduación agradeció a su madre Verónica por los sacrificios que hizo por ella, como levantarse a trabajar a las 4 de la mañana en la industria avícola, en las también conocidas como “polleras”.
“Nos graduamos de Harvard, mamá”, dijo Nataly después de egresar del posgrado en Estados Unidos.
Es la primera persona en su familia en tener estudios de bachillerato, licenciatura y posgrado. Además, es asistente de investigación e intérprete en Harvard.
Nataly Morales es originaria del Mezquital, Durango, en México. En 2001, cuando tenía 5 años, llegó a Estados Unidos y su mamá arriesgó la vida para cruzar la frontera. Su papá era un trabajador migrante y tenía pendiente una aplicación de la reforma de los 80. Gracias a él, Nataly y su mamá pudieron arreglar sus papeles.
Su papá cayó en el alcoholismo. Verónica decidió que esa vida no era la mejor para ellas y se separaron de él. Nataly y su mamá enfrentaron varios obstáculos para vivir mejor. Pero Verónica siempre le inculcó el estudio para que tuviera un mejor futuro.
Su admisión a Harvard
En un avión, antes de despegar rumbo a su tierra, Durango, el 31 de julio de 2020 Nataly y su mamá recibieron un correo con la noticia de la admisión en Harvard.
“Vi que me aceptaron y empecé a llorar como nunca. Abracé a mi mamá y reflexioné sobre todas las adversidades que pasamos juntas”, dijo Nataly, en entrevista con Conexión Migrante.
Un promedio de 50 mil personas busca ingresar a Harvard, pero solamente aceptan a 2 mil estudiantes cada año. Actualmente, 12.5% de los estudiantes que conforman la clase 2025 es hispano.
Nataly inició sus clases de posgrado en Harvard durante la pandemia, por lo que todo era en línea. Obtuvo la maestría en educación con enfoque en políticas educativas.
Retos al ser migrante mexicana y estudiar en Harvard
Debido al alcoholismo, a su papá lo diagnosticaron con cirrosis terminal mientras Nataly estaba en el primer semestre en Harvard. Por lo que balanceó estar en la escuela y cuidar a su papá hasta el último día.
A pesar de que hay muchos latinos en Estados Unidos, pasaron 20 años para que Nataly tuviera a su primer profesor latino y lo conoció en Harvard.
”]El día de su graduación, Nataly le rindió homenaje a su mamá como agradecimiento por todos los sacrificios que hizo por ella. Frente a las escaleras de Harvard, la joven le puso la toga y el birrete.
Nataly personalizó su birrete con fotos de su familia, la bandera de México y rosas blancas. Quiso conectar con su cultura y usó una toga artesanal elaborada por doña Angélica, una costurera muy apreciada en su natal El Mezquital, en Durango. También usó joyería elaborada por artesanos indígenas.
Educación de Nataly Morales y su experiencia como migrante mexicana
Nataly se graduó de Chestatee High School y estudió la licenciatura en Ciencias Políticas de la Universidad de North Georgia (UNG). Participó en Latina Empowerment & Development Conference (LEAD), la cual busca motivar a las mujeres latinas para que estudien.
Desde ese momento, Nataly supo que estudiar en el programa de Educación de Harvard. En su etapa universitaria fue parte del programa McNair Scholar, el cual da fondos federales para preparar a los universitarios que quieren estudiar el posgrado.
Viajó a Perú y a España como estudiante becada y fue mentora de varios estudiantes latinos para que pudieran estudiar en el extranjero. Realizó prácticas en el Congreso de Estados Unidos para aumentar la representación de los estudiantes latinos en el legislativo.
Residencia en Estados Unidos
En su primer proceso de solicitud de residencia, un notario las estafó y buscaron ayuda en una iglesia que apoya a las personas migrantes de bajos recursos. El día de su cumpleaños 11 obtuvo la residencia estadounidense.
“Mis papás, como muchos padres migrantes, vinieron a Estados Unidos en busca de mejores oportunidades para mi futuro”, dijo Nataly.
Actualmente, Nataly cuenta con las ciudadanías estadounidense y mexicana.
Nataly Morales y su labor por los migrantes
Nataly se dio cuenta de la necesidad que tienen las personas migrantes por hablar el idioma en Estados Unidos.
“Mis papás no hablaban inglés y yo aprendí al año de estar en la escuela. Entonces, tenía la responsabilidad de ayudarlos a navegar la vida en Estados Unidos”, agregó.
A pesar de sus logros, Nataly no olvida sus raíces mexicanas y en casa habla español. Para ayudar a la comunidad latina en Georgia, se certificó en traducción e interpretación en español e inglés.
Actualmente, realiza interpretaciones y traducciones académicas, médicas, de inmigración, negocios y generales a bajos costos. También trabaja con organizaciones sin fines de lucro para apoyar a la comunidad migrante.