Cientos de migrantes y organizaciones civiles de todo Estados Unidos se congregaron en Washington DC para exigir al gobierno del presidente Joe Biden de un alivio definitivo a los 11 millones de migrantes indocumentados que viven y trabajan en el país.
En específico, los manifestantes se plantaron frente a la sede del Partido Republicano y recorrieron algunas calles donde están los edificios del poder legislativo.
Por otro lado, la protesta estuvo conformada por grupos defensores de migrantes originarios de Maryland, Virginia, Nueva York y Pensilvania.
Además, los activistas pidieron conceder una protección especial para los trabajadores esenciales, muchos de los cuales laboran en las áreas de:
- Limpieza
- Alimentación
- Agricultura
- Construcción y
- Salud
Al respecto, Linda Sarsour, directora ejecutiva de MPower Change, dijo que es necesario que haya programas que no se olviden de los migrantes.
Tras pasar frente a la sede del Partido Republicano algunos activistas hicieron un acto simbólico de desobediencia civil frente a los edificios del Senado.
Además, los manifestantes pidieron a los liderazgos demócratas en ambas cámaras del Congreso a impulsar una solución para los millones de trabajadores esenciales. Pues algunos de ellos tienen permisos de temporales como TPS y DACA, que también esperan se resuelva su estatus migratorio.
Marcha destaca trabajo de las mujeres migrantes
En tanto, la marcha puso de relieve el trabajo de las mujeres en diversos sectores productivos. Muestra de ello es el testimonio de Alejandra, migrante indocumentada que está afiliada a un sindicato de trabajadores de limpieza.
“Vivo todos los días sabiendo que podría ser separada de mis hijos y, como madre soltera, este es un miedo constante y agonizante”
Alejandra, trabajadora de la limpieza e inmigrante irregular
Esta trabajadora dijo que es difícil explicar lo que significa vivir con temor constante a ser arrestada y separada de su familia.
Por su parte, la activista Natali Fani-González explicó que el movimiento por una reforma migratoria para los trabajadores esenciales no puede bajar la guardia. La activista de Maryland dijo que el aparato político debe entender que el debate para resolver la problemática y no debe seguir postergándose.
