La madre de la salvadoreña que murió asesinada a manos de policías en Quintana Roo, Rosibel Arriaza, solicitó ayuda al presidente Joe Biden para que sus nietas recibieran refugio en los Estados Unidos, pues son menores de edad y han quedado solas.
“Yo tengo temor que a mis niñas les suceda algo en México y tampoco quiero traerlas a El Salvador, quiero pedirle al presidente Biden que me ayude, me tienda la mano y les dé refugio a mis nietas en Estados Unidos”, declaró
Días antes de que la madre de Victoria Salazar se trasladara a Cancún Quintana Roo para reconocer el cuerpo de su hija y comenzar con los trámites de extradición, respondió a la agencia AFP que iría a México a vivir el luto con sus nietas, pues deseaba consolarlas.
“No sé cuándo voy a volver ni si podré traer el cuerpo de mi hija conmigo al país, no lo sé, todo ha sido bien difícil”, dijo la señora Rosibel.
De la misma manera exigió al Gobierno de México justicia por el asesinato de su hija. Luego hizo su petición al presidente de los EE.UU.
“Le pido al presidente Biden que me haga el favor y me les dé algo, refugio o algo a mis niñas“, solicitó la señora, poco antes de partir en su vuelo a Cancún.
La víctima salvadoreña, mujer y migrante
La brutal injusticia con al que fue sometida Victoria Salazar en Tulum generó mucha indignación, entre las mujeres y la comunidad migrante. Ella residía en México desde hace 5 años, era madre de dos pequeñas de 12 y 16 años de edad.
Por otro lado, también se sabe que tenía una relación con un hombre mexicano, el cual está detenido por abuso sexual.
La hija adolescente de 16 años estaba desaparecida. Sin embargo, ha sido localizada por el presidente salvadoreño, Nayib Bukele, y la Fiscalía mexicana.
De acuerdo con fuentes extraoficiales del medio La Opinión, la señora Rosibel Arriaza, llegó el jueves santo a México. Asimismo, la madre de Victoria era escoltada por el medio hermano de la víctima, René Olivares.