Natalie Khawam, abogada de la familia Guillén, dijo que la soldado Vanessa envió un mensaje de texto a uno de sus supervisores desde su celular el mismo día que despareció en la base militar de Fort Hood en Texas.
La abogada y los familiares de la joven pidieron a las autoridades que intervengan los teléfonos para tener más detalles sobre sus últimos movimientos y quiénes estuvieron con ella el 22 de abril.
Además, exigieron que se revise cualquier cámara de vigilancia en los alrededores. Sin embargo, las autoridades militares expresaron que no había dispositivos en el espacio, lo cual resulta extraño porque es una base militar.
Oficiales de Fort Hood indicaron que Vanessa envió un mensaje de texto a uno de sus supervisores, según Khawam.
“Del celular de Vanessa se mandó el número de un arma de fuego. Este mensaje de texto nos resulta muy inusual porque no es algo que se envíe normalmente entre los soldados de la base. Por eso pensamos que existe una posibilidad de que alguien más hubiera enviado el mensaje. Pero las autoridades militares no nos quieren decir el destinatario del miso”, argumentó Khawam a Univisión Noticias.
Varias personas también informaron que vieron a la soldado ese día; pero los encargados de la base militar no revelaron quién fue el último en verla.
Los administradores del fuerte no han dado declaraciones sobre las alegaciones de acoso sexual contra la soldado y el curso de la investigación por su desaparición. Argumentan que la búsqueda, encabezada por el Comando de Investigación Criminal del Ejército de Estados Unidos (CID), está en curso.
“Hay muchas mentiras en este caso por parte de Fort Bliss. Ellos están encubriendo algo y por eso es que pienso que la única forma de saber la verdad es a través de la investigación del Congreso”, añadió Khawam.
Con el fin de buscar que el Congreso investigue el caso; la abogada se encuentra en Washington DC para reunirse con el senador Ted Cruz y con representantes de la Casa Blanca.
