La alegría de la familia González Pantoja, por el nacimiento de su miembro más pequeño, se vio empañada por un desconocido padecimiento que hace que Luis Manuel, de 10 meses, pese 28 kilos.
Originarios de Tecomán, Colima, los padres de “Luisito” han hecho todo lo posible por cuidar la salud de su hijo, sin embargo ni los médicos han podido dar un diagnostico preciso sobre su enfermedad.
De acuerdo con su madre, María Isabel Pantoja, de 24 años, el niño no presentó ninguna complicación al nacer.
“Pesó 3.58 kg y midió 52 cm., todo estuvo bien; le hicieron la prueba del tamiz y los estudios necesarios para un recién nacido, no hubo ningún problema”, comenta en entrevista para Conexión Migrante.
Sin embargo, no fue hasta un mes después que comenzó a notar un crecimiento anormal en su hijo.
“Conforme fue pasando el tiempo, como un mes o mes y medio, vimos que algo no estaba bien. Al segundo mes ya pesaba entre 9 y 10 kilos”, relata.
Sin diagnóstico aparente
A los dos meses de nacido, Luis Manuel fue llevado a una clínica para ser vacunado, sin embargo los médicos lo remitieron de inmediato a urgencias.
“El pediatra me dijo que tenía que hacerle estudios, para ver si no tenía problemas con la tiroides; resultó que no” cuenta la joven madre.
Tras los primeros análisis el pequeño fue puesto a una dieta rigurosa, sin embargo, luego de tres meses, sus padres no notaron mejoría, por lo que recurrieron a nuevamente al médico.
Ahí detectaron la posibilidad de que el niño padeciera el síndrome de Prader Willi, una rara enfermedad genética que afecta principalmente al hipotálamo, la parte del cerebro encargada de controlar el hambre, la temperatura corporal y el sueño.
Los problemas
De ser cierto que el pequeño padezca este síndrome, sus padres tendrían que administrarle un tratamiento hormonal; cada inyección les costaría al rededor de 10 mil pesos, dinero con el que no cuentan.
Actualmente un grupo de expertos en nutrición de Guadalajara, conocido como La Zona, se encuentran apoyando a la familia en el diagnóstico del caso, se espera que para la segunda semana de noviembre se tenga la certeza de si padece o no Prader Willi.
Actualmente Luisito utiliza pañal para adulto de talla mediana, así como ropa para niños de 9 a 10 años, que va dejando rápidamente debido a su aumento de talla. Su salud también se ha visto afectada en otros sentidos.
“Van como tres ocasiones que se pone mal del pecho, recibe nebulizaciones en el hospital. Parece que tiene un tipo de bronquitis, pero la doctora dice que es por su peso”, comenta su preocupada madre.
La familia ha pedido ayuda en redes sociales, pues el único sustento de la familia es su Mario González, el padre de familia, quien en ocasiones debe dejar de trabajar para cuidar a Alberto, el otro hijo de la familia.
“Las personas me mandan mensajes, dicen que quieren ayudarnos, pero sobre todo que desconfían de si realmente nos llegará el recurso”, explica.
Localizar a la familia es muy fácil, basta con buscar en Facebook el perfil de Isabel Pantoja Martínez.
