Estados Unidos vivirá un Día sin Inmigrantes a nivel nacional el próximo 1 de mayo, donde se prevé la participación masiva de miles de personas en ciudades como Los Ángeles, Chicago, Nueva York y Dallas, para exigir la derogación de las políticas anti-inmigrantes de Donald Trump, el restablecimiento de los fondos federales a Planned Parenthood y rechazar las declaraciones misóginas del Presidente.
La movilización coincide con la conmemoración del Día de los trabajadores internacionales, un día que rescataron los inmigrantes ya que nadie lo celebraba en Estados Unidos, asegura Jorge Mújica Murias activista y líder migrante.
“El 1 de Mayo, a pesar de que nació en Chicago, se había olvidado; nadie lo celebraba aquí hasta que los inmigrantes lo rescatamos y lo trajimos de regreso porque en nuestros países sí se celebra. Es por eso que escogimos esta fecha”.
¿Quiénes convocan?
A diferencia de la movilización que se realizó el 16 de febrero de este año, que fue anónima y nació de las redes sociales, en la que las personas participaron sin organizaciones que la respaldaran, la marcha del 1 de Mayo cuenta con el apoyo de sindicatos y comunidades de inmigrantes como:
- La Central Laboral de Chicago.
- Sindicatos de la industria alimenticia.
- Organizaciones de trabajadores de la construcción.
- Trabajadores de servicios.
- Organizaciones afroamericanas en contra de la discriminación y la brutalidad policiaca.
- Organizaciones a favor del medio ambiente.
- Comunidades latinas y de inmigrantes asiáticos, coreanos, filipinos y
- Clubes de mexicanos en Estados Unidos y sus Federaciones.
Carta legal para evitar represalias
Muchos trabajadores inmigrantes tienen miedo de participar en este tipo de eventos ante el miedo de ser despedidos por faltar un día a su trabajo y asistir a las movilizaciones.
Es por eso que organizaciones en favor de los derechos de los inmigrantes están publicando una carta para defender legalmente a los trabajadores.
Lugar y fecha
La cita es este 1 de Mayo, a la 1 de la tarde, en el Parque Unión que se encuentra en la esquina de la avenida Lake y Ashland, en el centro de Chicago.
