La política exterior que se adopta desde la Casa Blanca tiene un impacto directo en América Latina. La situación económica, los programas migratorios, la seguridad y el desarrollo en el hemisferio son tres de los aspectos con mayor relevancia en la región. Pero, ¿Qué propuestas tienen los candidatos para abordar estos temas?
Economía en América Latina
El Banco Mundial estimó en un informe publicado en abril, que el Producto Interior Bruto (PIB) de la región latinoamericana y el Caribe caerá un 4,6%.
El presidente Donald Trump ha implementado algunas políticas económicas que pueden servir de muros de contención en Latinoamérica.
Uno de los mayores proyectos fue el tratado comercial con Canadá y México (T-MEC), suscrito por los tres países pocos meses antes de la pandemia.
Joe Biden, por su parte, todavía ve la “relación con la región latinoamericana como algo esencial para Estados Unidos”.
Biden presentó un plan en el que prioriza los empleos de los estadounidenes, excluyendo incluso las relaciones comerciales con América Latina.
Ese programa, que se dio a conocer hace un mes, proponía una inversión de 700 mil millones de dólares para estimular la economía principalmente en EEUU.
Seguridad y desarrollo
Trump mostró su intención de seguir creando programas que promuevan el desarrollo económico y la seguridad en la región a través USAID.
Esta institución cuenta actualmente con 13 oficinas en varios países latinoamericanos, impulsando cuatro programas regionales.
Además, Trump escogió a Carlos Trujillo para ocupar el puesto de subsecretario de Estado para Asuntos del Hemisferio Occidental.
Una decisión que puede entenderse como toda una declaración de intenciones para seguir brindando apoyo en América Latina.
Por su parte, Biden está convencido de que “hemisferio occidental tiene el potencial de ser seguro, democrático y próspero”.
Uno de los planes que propone es el de incentivar programas específicos en Centroamérica sobre todo en los países del Triángulo Norte.
Inmigración y DACA
El partido republicano, con Trump al frente, tiene previsto continuar con su línea de política dura contra la inmigración irregular que cruza por la frontera sur del país.
Prometió, en la campaña de hace cuatro años, construir un muro en la frontera con México. Ese proyecto continúa en su lista de prioridades.
Otra de las asignaturas pendientes es la Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA).
Aunque el Tribunal Supremo de Justicia falló en contra de la cancelación del programa, la administración Trump ya no aceptará más solicitudes y limitará las renovaciones.
En su programa electoral, el exvicepresidente aboga por una reforma del sistema de inmigración.
“La Administración Obama-Biden creó el programa de DACA para dar a los dreamers la oportunidad de continuar con sus vidas sin temor a ser deportados”.
Asilo
Anteriormente los solicitantes de asilo, muchos de ellos centroamericanos, podían esperar la decisión de un juez de inmigración en suelo estadounidense.
Durante su mandato, Trump ha cerrado acuerdos con países como México o Guatemala para impulsar el programa de ‘Tercer país seguro’.
Los planes del actual mandatario estadounidense son continuar con estas políticas y cerrar acuerdos con otros países de la región latinoamericana con esa misma fórmula.
En su programa electoral, Biden se compromente a “poner fin a las perjudiciales políticas de asilo de Trump”.
Promete que, en caso de llegar a la Casa Blanca, “se asegurará de que los que buscan refugio en Estados Unidos sean tratados con dignidad”.
