Este viernes, los astronautas de la NASA Chris Cassidy y Bob Behnken salieron a una caminata espacial. Su objetivo fue reemplazar baterías viejas en la Estación Espacial Internacional.
Cassidy y Behnken dieron la primera de cuatro caminatas espaciales programadas para esta tarea. De acuerdo con la NASA, una vez que las nuevas baterías estén instaladas, el laboratorio espacial deberá funcionar sin problemas por el resto de su vida operativa.
Estas nuevas baterías están fabricadas con iones de litio. Su constitución las hace más eficientes que las de níquel-hidrógeno que estaban instaladas hasta ahora. Las baterías de iones dan energía a la estación cuando está en el lado nocturno de la Tierra.
Out with the old,
in with the new → ?A new lithium-ion battery is now installed on the @Space_Station. Here’s a recap of milestones two hours into the spacewalk: pic.twitter.com/tTRNNCfExF
— NASA (@NASA) June 26, 2020
Durante la caminata del viernes, Cassidy perdió un pequeño espejo cuando salió de la estación espacial. El astronauta narró cómo el artefacto se alejó de él flotando a una velocidad de 35 centímetros por segundo. Según la NASA, la pérdida de este objeto no representa una amenaza para la caminata espacial ni para la estación.
Cada astronauta en caminata espacial lleva un espejo en cada manga para tener una vista más amplia al trabajar.
La tarea de la NASA desde 2017
Los dos astronautas son veteranos en caminatas espaciales: esta fue la séptima de Cassidy y la octava de Behnken.
Bob Behnken y el astronauta Doug Hurley se unieron a Cassidy en la estación espacial el pasado 31 de mayo. Ambos completaron el primer lanzamiento de humanos desde Estados Unidos en casi 10 años. Lo hicieron a bordo de la cápsula Crew Dragon de Space X.
El reemplazo de las baterías de níquel-hidrógeno de la estación espacial comenzó en enero de 2017. En ese año, una nave de carga japonesa llevó otras baterías de iones de litio al espacio.