El gobierno de Donald Trump cerrará la asistencia legal, clases de ingles y actividades recreativas en los refugios para niños migrantes, pues estas actividades no tienen que ver con su seguridad. Pues según la HHS estas actividades“no son directamente necesarias para la protección de la vida y la seguridad, incluidos los servicios de educación, servicios legales y recreación”.
Esta semana el Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS), empezó a eliminar los recursos que se utilizaban para estas actividades, alegan que es necesario para cumplir con la Ley de Antideficiencia, la cual establece que es ilegal que un contratista brinde servicios gratuitos al gobierno.
Funcionarios federales dijeron que los recursos de la oficina de refugiados se están agotando, por lo que no pueden atender a los menores no acompañados que llegan a la frontera sur.
“Se requieren urgentemente recursos adicionales para satisfacer las necesidades humanitarias creadas por esta afluencia, tanto para mantener el bienestar crítico de los niños como para liberar las operaciones y aumentar la capacidad”, dijo HHS
Por su parte, la presidenta del subcomité HSS de Asignaciones de Vivienda, Rosa DeLauro, no está de acuerdo con la cancelación de estos programas pues cree que causará más daño a los niños.
“Los servicios educativos, recreativos y legales básicos para niños no acompañados son imprescindibles para su bienestar físico y mental. La cancelación de estos servicios por parte de ORR causará más daño a los niños, muchos de los cuales continúan languideciendo durante meses sin que se les coloque de manera segura y expedita. la atención de un patrocinador “, comentó.
La ley actual dice que los niños migrantes que cruzan sin autorización a Estados Unidos deben ser enviados a un refugio del gobierno cuyas las instalaciones deben ser lo menos restrictivas posibles y diferentes a una cárcel, pues se quedara hasta que puedan unirse con sus familiares.
Con información de The Hill
