Roxanna Hernández era una migrante hondureña transgénero de 33 años que falleció el pasado viernes en el Centro Médico Lovelace (LMC) en Albuquerque, Nuevo México, luego de permanecer un par de días bajo el cuidado del Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE).
De acuerdo con la versión oficial, Hernandez habría fallecido por síntomas de neumonía, deshidratación y complicaciones asociadas con el virus del VIH, sin embargo, defensores de los derechos de los inmigrantes y de la comunidad LGBTQ acusaron a ICE por dejarla morir.
“ICE dejó morir a Roxanna, los pacientes no mueren de complicaciones por el sida hoy en día, mueren debido a la negación del tratamiento”, dijo hoy a Efe Bamby Salcedo, presidente y directora ejecutiva de la Coalición TransLatin@.
Este caso se da en medio de las críticas contra las autoridades migratorias por las agresiones y violación de los derechos humanos contra los inmigrantes.
Hernández fue tomada bajo custodia de ICE el pasado 13 de mayo en San Diego, posteriormente fue transferida a El Paso y más tarde a Milán, Nuevo México, donde fue alojada en la unidad transgénero.
El 17 de mayo, Hernández fue admitida en el Hospital General de Cibola con síntomas de neumonía deshidratación y complicaciones asociadas con el VIH.
Por lo complicado de su situación ella fue trasladada a Albuquerque ese mismo día y permaneció en la unidad de cuidados intensivos del hospital hasta que murió.
Según ICE, Hernández ingresó a los EU Ilegalmente dos veces entre 2005 y 2009, y una tercera vez en enero de 2014.
Las autoridades dicen que Hernández también fue declarado culpable de robo en abril de 2006, y de conducta lasciva, inmoral, indecente y prostitución en mayo de 2009.
Hernández es el sexto detenido que falleció bajo custodia de ICE desde octubre de 2017.