El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, sugirió este miércoles que los maestros de las escuelas de la Unión Americana puedan portar armas en el salón de clases.
Esto como respuesta a los resientes tiroteos en escuelas primarias y secundarias de EU.
Asimismo, el mandatario estadounidense evitó hacer cualquier compromiso para imponer mayores controles o prohibiciones sobre algunas armas, haciendo caso omiso a las miles de peticiones que han hecho alumnos y padres de familia.
“Si tienen un maestro adepto a las armas de fuego, ellos bien podrían terminar el ataque bastante rápido”, dijo Trump, quien ofreció fortalecer el sistema de verificación de antecedentes para los que compren armas de fuego.
”Hay algo que se llama portar armas de forma oculta, y que solo funciona cuando tienes a gente entrenada para ello”, dijo Trump. ”Los profesores tendrían un permiso especial, y (la escuela) ya no sería una zona libre de armas” de la que puedan aprovecharse los “maníacos”, agregó.
”Vamos a examinar esa idea muy en serio, mucha gente va a estar opuesta a ello, y mucha gente va a estar de acuerdo”, afirmó el presidente, al reconocer que es algo “controvertido”.
Como era de esperarse, la idea no fue bien recibida por los familiares de las víctimas de la violencia armada que fueron convocados esta tarde en la Casa Blanca.
“Aprecio el punto sobre armar a maestros. Personalmente no es algo que apoyo. En lugar de armarlos con armas de fuego, mejor armarlos con el conocimiento para prevenir que estos actos pasen”, dijo Nicole Hockley, cuyo hijo Dylan fue uno de los 21 niños asesinados en la primaria Sandy Hook en Connecticut en 2012.
Bajo la ley federal de EE.UU., la edad mínima para comprar un arma de fuego son 21 años si es una pistola y 18 si es un rifle, aunque algunos vendedores sin licencia las pueden suministrar a personas aún más jóvenes.
