El saldo de los constantes operativos de ICE en California ha provocado tal temor en los trabajadores que muchos han dejado de presentarse en sus trabajos por miedo a ser deportados, perjudicando a los empleados, sus contratadores y a los consumidores.
Hace unos día el Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE) anunció que realizará auditorias en 77 empresas ubicadas en el norte de California para ver si los empleadores contrataban a trabajadores indocumentados, del mismo modo las autoridades migratorias adelantaron que multarían a los patrones que contraten a estas personas.
A pesar de que las auditorias están dirigidas contra las empresas y no contra los trabajadores, los empleados han preferido no arriesgarse y permanecer en sus hogares por temor a ser aprehendidos por la migra.
Por su parte, los empresarios advierten que estas auditorias afectarán la economía local, provocando un aumento de precios en la comida.
Del mismo modo señalaron que este miedo provocará que las personas no gasten su dinero, dañando aún más la economía local.
Entre el lunes 29 y el miércoles 31 de enero los agentes de ICE entregaron la notificación de inspección en varios negocios a través del documento llamado I-9.
Esta forma contiene los datos de los trabajadores, incluyendo la elegibilidad de los empleados para laborar en Estados Unidos.
Con información de Univisión
