Durante su visita a Tijuana, el Nuncio Apostólico en México, Monseñor Joseph Spiteri, enfatizó la importancia de no normalizar la violencia y de proteger la dignidad de los desplazados por violencia.
En un recorrido que incluyó el muro fronterizo y el Desayunador Padre Chava, el representante del Vaticano resaltó la labor de concienciación frente a la crisis de la movilidad interna.
La violencia no debe convertirse en algo habitual
Monseñor Spiteri expresó su preocupación por la indiferencia social ante la violencia que viven comunidades desplazadas en México.
“No caigamos en el pecado de habituarnos a ciertas situaciones, eso es un poco el miedo de la iglesia que la sociedad se calle esta mentalidad de “como no me toca a mi, entonces no me preocupo o no me toca a mi, todo anda bien”, y no, es una cuestión que nos toca a todos”, declaró.
El Nuncio Apostólico destacó que esta problemática no solo representa un desafío de seguridad, sino también una crisis de derechos humanos y dignidad.
Por otra parte, afirmó que cada persona, tiene una historia que merece ser atendida y respetada.
Protección de comunidades de desplazados por violencia: un esfuerzo compartido
Durante su estancia en la ciudad, Monseñor Spiteri destacó que existe un diálogo con la presidenta Claudia Sheinbaum a quien le ha expresado diversas necesidades.
La principal de ellas, es la de salvaguardar los derechos de comunidades afectadas, particularmente indígenas y los desplazados por violencia.
Reiteró que la iglesia está haciendo una labor con los tres niveles de gobierno para la concientización sobre la defensa de derechos humanos y la dignidad de las personas.
“Obviamente son situaciones muy complejas que no se van a resolver de un día a otro pero pienso que es muy importante que tengamos conciencia de eso”, agregó.
La Iglesia como promotora de la dignidad humana
El asesinato del padre Marcelino Pérez en Chiapas fue citado por Monseñor Spiteri como un ejemplo de los riesgos que enfrentan quienes defienden los derechos de los vulnerables.
Pese a los desafíos, el Nuncio destacó que la Iglesia seguirá trabajando para crear conciencia sobre las realidades de la violencia en México.
“Hay personas que dan la vida para defender estos derechos fundamentales”, expresó.
Visita al Desayunador Padre Chava, un mensaje de solidaridad a los primeros respondientes
La mañana de este sábado el Nuncio Apostólico visitó el Desayunador Padre Chava, una de las obras más conocidas de Proyecto Salesiano .
Ahí además de recorrer las instalaciones del lugar que también funciona como albergue para hombres deportados y migrantes, dialogó con los encargados.
Juan Carlos Solís, director del Proyecto Salesiano Tijuana expresó que la visita dejó un mensaje de unión y reconocimiento a la labor que realizan.
“Sus palabras fueron de aliento y gratitud para nuestro trabajo”, señaló.
De igual manera Claudia Portela, administradora de Proyecto Salesiano Tijuana destacó que Monseñor Spiteri les pidió que sigan siendo fuertes.
“Nos invita a ser perseverantes, creo que la casa salesiana como otros albergues en Tijuana, tratamos de brindar esperanza, fortaleza, paciencia.
Y a veces es bueno que vengan y nos lo digan porque hay momentos en que se bajan las baterías”.
Por otra parte referente a la atención que brindan a los desplazados por violencia, afirmó que se trata de un tema difícil y desgastante.
“La gente está sufriendo, el desplazamiento forzado destruye familias, daña a las personas, a veces decimos, ¿cómo más te puedo ayudar?”.
La visita del Nuncio en Tijuana reiteró el compromiso de la Iglesia con la protección de los más vulnerables y con el llamado a la sociedad a no ser indiferente ante las crisis que enfrenta el país.