La oración “Señor mío Jesucristo” es, sin duda, una de las oraciones básicas para los católicos. Con ella pedimos perdón a Nuestro Señor Jesús por nuestros pecados en un acto de contrición.
¿Qué es un acto de contricción?
De acuerdo con la tradición católica, el acto de contrición es un modo de expresar nuestro arrepentimiento por haber pecado. También nos permite expresar el dolor que sentimos por habernos fallado a nosotros mismos y, con ello, a Dios.
Normalmente, el acto de contrición va acompañado de una oración. Esta oración nos ayuda a pedir perdón de manera sincera después de haber reflexionado sobre nuestros pecados.
Y es que, aunque pueden perdonarnos en la confesión, es necesario siempre tener una preparación previa para este sacramento. Sólo de esta forma podemos tener un acercamiento sincero a Dios.
Hay diferentes oraciones que podemos rezar para hacer el acto de contrición. Sin embargo, una de las más famosas es la oración “Señor mío Jesucristo”. Puedes leerla a continuación y prepararte para recibir el perdón de Dios en tu corazón.
Te compartimos la oración Señor mío Jesucristo
Señor mío, Jesucristo,
Dios y Hombre verdadero, Creador, Padre y Redentor mío,
por ser Vos quien sois y porque os amo sobre todas las cosas,
me pesa de todo corazón haberos ofendido;
propongo firmemente nunca más pecar,
apartarme de todas las ocasiones de ofenderos,
confesarme y, cumplir la penitencia que me fuera impuesta.
Ofrezco, Señor, mi vida, obras y trabajos,
en satisfacción de todos mis pecados, y, así como lo suplico, así confío en vuestra bondad y misericordia infinita,
que los perdonareis, por los méritos de vuestra preciosísima sangre, pasión y muerte, y me daréis gracia para enmendarme, y perseverar en vuestro santo amor y servicio,
hasta el fin de mi vida.