Tijuana.- Este fin de semana, la población migrante albergada en los espacios del Proyecto Salesiano participó en las actividades de la celebración de San Juan Bosco.
Fue un aproximado de 350 personas las que dieron vida a presentaciones artísticas de canto y baile y además cocinaron para la comunidad asistente.
La fiesta inició el sábado en el Oratorio Salesiano San Juan Bosco, espacio donde también opera un albergue para mujeres y menores en contexto de movilidad.
Cabe mencionar que el 31 de enero se festeja a San Juan Bosco sin embargo, por las situaciones climáticas se movió el fin de semana previo.
Fiesta y color para celebrar como familia
En Tijuana están activas seis obras del Proyecto Salesiano.
- Desayunador Salesiano “Padre Chava”
- Oratorio San José Obrero
- Oratorio San Francisco de Sales
- Oratorio María Auxiliadora
- Oratorio Domingo Sabio
- Oratorio San Juan Bosco
Además, el colegio para menores de escasos recursos Don Bosco que se ubica en el Oratorio del mismo nombre.
Las actividades iniciaron con una procesión que caminó desde varias cuadras de distancia hasta la iglesia donde se desarrolló una misa.
Posteriormente iniciaron las actividades artísticas que desde hace meses prepararon las personas que viven en los albergues y refugios.
Dentro de las presentaciones, destacaron los residentes del albergue del desayunador “Padre Chava” con la interpretación de una canción inédita.
Por otra parte, pate de las madres y menores que actualmente se encuentran en el refugio Don Bosco cantaron y bailaron en su número artístico.
La celebración culminó el domingo 28 de enero con una kermés en el mismo Oratorio y en San José Obrero.
Ambas presencias están situadas en colonias de la Zona Este de la ciudad, distinguida por contar con áreas marginadas y conflictivas.
Proyecto Salesiano, un referente en la atención a migrantes en la frontera
Con más de 130 años en México, el Proyecto Salesiano decidió extenderse a ciudades de la frontera norte al detectar el incremento del flujo migratorio.
En entrevista, su coordinadora general en Tijuana, Claudia Portela, detalló cómo ha sido el proceso de integración con la comunidad en movilidad.
Comentó que hace 37 años llegaron a Tijuana y en la misma década de los años 80, se asentaron en Mexicali, Nuevo Laredo, Nogales, entre otros.
“Empezó con la llegada de migrantes mexicanos que fueron deportados o luego venía la familia y no podía cruzar y atendieron a estas familias”.
Agregó que este tipo de actividades junto con las que realizan el resto del año permiten que sus residentes de integren a la sociedad.
“La idea es que se sientan en un clima de familia, de que se sientan respetados en su dignidad y valorados en su persona”.
Escolarizan a la niñez migrante
La atención integral a la niñez migrante se ha convertido en uno de los principales objetivos dentro del albergue Don Bosco.
Ya que apoyados por instituciones como Save The Children y BebéBus, realizan actividades de integración para los menores que reciben.
También se dedican a escolarizar a los menores esto dentro del colegio que abrieron en el cual imparten educación a menores de escasos recursos.
“Así hayan estado un día, cuando se van les damos una constancia. Aunque con la espera de la cita CBP, algunos han terminado sus estudios”.
Lugar de acogida para mujeres y menores
El albergue Don Bosco tiene capacidad para atender hasta 130 personas y solo recibe a mujeres y menores de edad.
No solo reciben a mujeres que llegan por su propio pie, sino que instancias de gobierno también canalizan a mujeres migrantes y/o víctimas de violencia.
Si bien, los servicios son gratuitos, invitan a cada mujer a integrarse a las actividades para mantener los espacios en buenas condiciones.
“Hay que ser muy honestos, al principio llegan hurañas o con malas impresiones, pero después no se quieren ir”, dijo.
Durante su estadía, las mujeres son orientadas a otras organizaciones, como el Centro de Recursos para Trabajadores a fin de que puedan obtener un empleo.
Concluida la celebración, el Proyecto Salesiano preparará actividades recaudatorias para este 2024, año pues además el Desayunador “Padre Chava” cumplirá 25 años en Tijuana.