Para muchos niños y niñas, el regreso a clases puede ser complicado por diversas razones, una de la más difíciles es el acoso escolar, también llamado bullying.
A grandes rasgos, el bullying se refiere a las situaciones de violencia que sufren los niños y niñas por parte del entorno escolar.
El programa del gobierno de USA stopbullying.gov te da algunas claves para ayudar a tus hijos en este regreso a clases.
Cómo prevenir el bullying
Los padres, el personal educativo y otros adultos que se preocupan por el problema tienen un papel que desempeñar en la prevención del acoso. Ellos pueden:
- Ayudar a los niños a entender el bullying. Explicarles qué es el acoso y cómo enfrentarlo de manera segura. Decirles a los niños que el acoso escolar es inaceptable. Asegurarse de que los niños sepan cómo recibir ayuda.
- Mantener abiertas las líneas de comunicación. Hablar con los niños de forma regular. Escucharlos. Conocer a sus amigos, preguntarles sobre la escuela y comprender sus preocupaciones.
- Alentar a los niños a hacer lo que aman. Las actividades, intereses y pasatiempos especiales pueden estimular la confianza, ayudar a los niños a hacer amigos y protegerlos de situaciones de acoso.
- Dar el ejemplo de cómo tratar a otros con amabilidad y respeto.
Ayudar a los niños a comprender qué es el bullying
Los niños que saben qué es el acoso pueden identificarlo mejor. Pueden hablar del acoso escolar si les sucede a ellos o a otros.
Los niños necesitan conocer maneras de enfrentar de forma segura el acoso y cómo recibir ayuda.
- Anima a los niños a hablar con un adulto de confianza si son acosados o ven que otros son acosados.
- Habla sobre cómo enfrentar a los niños que lo maltratan. Bríndale consejos, como utilizar el humor y decir “¡basta!” de forma directa y con confianza. Habla sobre qué hacer si eso no funciona, como alejarse.
- Habla sobre estrategias para protegerse, como permanecer cerca de adultos u otro grupo de niños.
- Aliéntalos a ayudar a los niños que son acosados al mostrar amabilidad y voluntad de colaboración.
- Mira estos episodios web y analízalos con tus niños.
Mantener abiertas las líneas de comunicación
Las investigaciones revelan que los niños acuden a sus padres y cuidadores para obtener consejos y ayuda antes de tomar decisiones difíciles.
En ocasiones, pasar 15 minutos al día hablando puede demostrarle a los niños que pueden hablar con sus padres si tienen algún problema.
Inicia conversaciones sobre los sentimientos y la vida cotidiana con preguntas como:
- ¿Qué pasó de bueno hoy? ¿Sucedió algo malo?
- ¿Cómo es la hora del almuerzo en tu escuela? ¿Con quién te sientas? ¿De qué hablas?
- ¿Cómo es viajar en el autobús escolar?
- ¿En qué destacas? ¿Qué es lo que más te gusta de ti mismo?
Existen maneras simples de que los padres y cuidadores se mantengan al día con la vida de sus niños.
- Lee los boletines informativos de la clase y los folletos de la escuela. Habla sobre ellos en casa.
- Visita el sitio web de la escuela.
- Asiste a los eventos escolares.
- Conoce al conductor del autobús.
- Conoce a los maestros y consejeros la noche de “Regreso a la escuela” o comunícate con ellos por correo.
- Intercambia teléfonos con los padres de los otros niños.
Alentar los niños a hacer lo que aman
Ayuda a los niños a participar en actividades, intereses y pasatiempos que les agraden. Los niños pueden realizar trabajos voluntarios, practicar deportes, cantar en un coro o unirse a un grupo juvenil o club escolar.
Estas actividades permiten que tus hijos se diviertan y conozcan a otras personas con los mismos intereses.
Pueden desarrollar la confianza y generar amistades que ayuden a protegerlos del acoso.
Da el ejemplo de cómo tratar a otros
Los niños aprenden del ejemplo de los adultos. Al tratar a otros con amabilidad y respeto, los adultos demuestran a los niños que no hay lugar para el acoso.
Aun cuando parece que no prestan atención, los niños escuchan cómo los adultos manejan el estrés y los conflictos, y cómo tratan a sus amigos, colegas y familiares.