El Observatorio Nacional de Prevención del Reclutamiento de Niñas, Niños y Adolescentes por Parte de la Delincuencia Organizada, estimó que alrededor de 30 mil niños trabajan en México para el crimen organizado en actividades como halconeo y tráfico de drogas.
La explotación de niños y niñas para involucrarlos en actividades ilícitas es una de las modalidades previstas en la Ley General para Prevenir, Sancionar y Erradicar los Delitos en Materia de Trata de Personas en México, a la que están expuestos los niños migrantes.
El Observatorio, que fue creado dentro de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) federal para concentrar información que ayude a prevenir y atender de manera específica a los menores de edad, advirtió que son insertados en actividades delictivas como el “halconeo”, que consiste en espiar a grupos rivales y autoridades, el traslado de drogas en lo que se conoce como “mulas”, el narcomenudeo y hasta el reclutamiento de otros menores, así como la extorsión, la vigilancia de casas de seguridad y el sicariato.
“El crimen organizado ve en niños, niñas y adolescentes un recurso humano manipulable, prescindible, de bajo costo y cuya ausencia en la actividad criminal no afecta la operación ni la estructura delictiva”, señaló la organización en un informe dirigido a la SSPC.
Agregó que existe una participación activa en conductas delictivas graves en las que los reclutados se integran a una estructura delictiva para cumplir órdenes, intervenir en la diversidad de actividades delincuenciales y, dependiendo de sus habilidades, capacidades y aptitudes, en ocasiones escalan en la pirámide organizacional”.
El Observatorio aclaró que no hay datos precisos sobre los niños reclutados por la delincuencia organizada y que sus estimaciones están basadas en los datos que posee la Red por los Derechos de la Infancia en México (Redim), de entre 30 mil y 35 mil niños y adolescentes que han sido reclutados.
Además, calcula que entre 145 mil y 250 mil niños y adolescentes están en riesgo de caer en las redes de los cárteles.
El Observatorio fue instalado en octubre de 2021 para que las autoridades gubernamentales y organizaciones de la sociedad civil determinen las dimensiones del problema que representa el uso de menores de edad en actividades ilícitas y las acciones que pueden emprender para protegerlos desde las causas.
Entras las causas que hacen vulnerables a los niños de caer en el crimen organizado, están las condiciones de inequidad, exclusión social y falta de oportunidades, así como los factores de inseguridad y violencia cotidiana, todo ello favorece su reclutamiento por parte de la delincuencia organizada.
El uso de los niños y adolescentes representa un beneficio legal para los grupos de delincuencia organizada por disminuye el riesgo de la detención de sus elementos que son adultos, toda vez que las leyes mexicanas y el sistema de justicia penal para adolescentes prohíbe la detención y reclusión de estos.