El martes, el exgobernador de Colorado, John Hickenlooper, ganó la nominación demócrata para enfrentar al senador republicano Cory Gardner en noviembre. Con su triunfo, supera una serie de tropiezos y rechaza el desafío de sus opositores.
La competencia primaria terminó rápidamente. The Associated Press declaró como ganador a Hickenlooper sólo media hora después de que terminó la votación. Con casi el 70% de los votos reportados, Hickenlooper llevó a Andew Romanoff, presidente de la Cámara de Representantes estatal, del 60 al 40%.
El año pasado, Hickenlooper realizó una candidatura fallida para la nominación presidencial demócrata. Aún así, este año fue persuadido para postularse y tomar el lugar de Gardner en el Senado.
Desde el inicio de la campaña, muchos consideraron a Hickenlooper como el favorito para ganar las primarias. Pero errores verbales y un encuentro con la Comisión de Ética de Colorado lo pusieron en un camino más rocoso de lo esperado para la nominación al Senado. Esto dio una nueva apertura a Romanoff. Sin embargo, los resultados finales terminaron beneficiando al exgobernador.
Los republicanos criticaron la victoria de Hickenlooper casi inmediatamente después de su anuncio. Por su parte, el Comité Senatorial Nacional Republicano (NRSC, por sus siglas en inglés) dijo que el exgobernador estaba “en un camino muy accidentado” durante las elecciones generales.
Joanna Rodríguez, portavoz del NRSC, emitió un comunicado respecto al triunfo de Hickenlooper. En él hace referencia a las violaciones de ética del exgobernador de Colorado:
En los próximos meses, los votantes aprenderán lo que Hickenlooper ha estado ocultando: su desprecio por la ley, su mal uso de los fondos de los contribuyentes y todos los obsequios y viajes ilegales de sus papás azucareros corporativos.