El Nido del Cañón es la escuela que profesores de Los Ángeles abrieron en el refugio La Pequeña Haití en Tijuana, para niños migrantes acudan.
La Pequeña Haití se encuentra en el cañón del Alacrán en Tijuana, de ahí surge el nombre de la escuela, cabe decir que, la zona donde se encuentra radican personas de bajos recursos.
Son unos 60 niños migrantes menores de 7 años los que empezaron a ir a El Nido del Cañón en dicho refugio, y entre sus nacionalidades se encuentran:
- Haití
- El Salvador
- Honduras
- Nicaragua
- Venezuela
- México
Cabe mencionar que algunos de los niños migrantes tienen doble nacionalidad, por ejemplo, haitianos que nacieron en Tijuana o los que nacieron en Venezuela con padres haitianos.
El pastor Gustavo Banda, fundador del refugio La Pequeña Haití, dijo en entrevista a La Opinión:
“La mayoría de ellos, por su edad, y porque tuvieron que desplazarse con sus padres, nunca habían estado en una aula de clases, así que están encantados”
Es al sur de la frontera donde se inauguro en el 2019 El Nido del Cañón en La Pequeña Haití y es el primer refugio para migrantes que cuenta con una escuela dentro de sus instalaciones.
Vanessa Esquivel, profesora bilingüe quien trabaja de tiempo completo en la escuela El Nido del Cañón dijo:
“Lo rápido que aprenden los niños migrantes cuando cuentan con un espacio que les ofrece seguridad y educación”.
Dentro de la escuela los niños migrantes cuentan con libros, mueble, legos o juegos de madera, todo adecuado a su tamaño y edad, de esa manera ellos interactúan.
Es el proyecto del Instituto Pedagógico de Los Ángeles (PILA) que reúne donativos para abrir nidos o escuelas similares en diversos países.
La Pequeña Haití cuenta con voluntarios para trabajar con los niños migrantes
La directora ejecutiva del PILA, Lindsay Weissert, dijo a La Opinión que:
“En México, el PILA solo ha abierto nidos en Tijuana con apoyo de educadores de todo el mundo que donan recursos y también su tiempo para enseñar a los niños migrantes”.
“Tenemos educadores voluntarios de muchos países, que apoyan por lo menos dos semanas cada uno”.
“La manera en que opera El Nido es que contratamos a una profesora de tiempo completo, e instruimos a voluntarios locales, pero adicionalmente tenemos los educadores voluntarios”.
Aunque por el momento, en La Pequeña Haití, los voluntarios locales serán madres y padres de los mismos pequeños:
Se comenzará a recibir solicitudes de voluntarios de Tijuana y otros países.
Pero el pastor Banda, dijo que:
“En El Nido vamos a tener unos 60 pequeñito menores de siete años, pero se nos iban a quedar sin escuela otros 60, más o menos, que no tienen escuela”.
“Usted sabe lo difícil que es que los niños migrantes cursen años escolares, porque son población en movimiento”, dijo el pastor.
Sin embargo, se logró un acuerdo con la Secretaría de Educación Pública (SEP) de México para que:
“Los estudios que realicen los niños tengan reconocimiento oficial, independientemente de la nacionalidad”.
