Diez empleados del restaurante de hamburguesas Burgerville, ubicado en Portland, Oregón, se ganaron una sanción y decenas de mensajes de odio por usar botones con las leyendas “Abolir el ICE” y “Nadie es ilegal” en sus uniformes.
De acuerdo con el restaurante Burgerville, los empleados fueron enviados a su casa por un día debido a que se negaron a quitarse los botones mientras estaban en su turno.
La protesta, que tuvo lugares a finales de agosto, se produjo en medio de la indignación nacional con respecto a la política de inmigración de “cero tolerancia” de la administración Trump que anteriormente separaba a miles de niños migrantes de sus padres en la frontera entre Estados Unidos y México, señaló The Hill.
Al respecto, la directora de recursos humanos de Burgerville, Liz Graham, dijo a medios locales que los clientes presentaron quejas por los botones de los empleados.
“Los invitados informaron que no querían ver mensajes personales y políticos mientras comían”, dijo Graham. “Además, algunos empleados expresaron que el contenido de los botones estaba atrayendo la atención no deseada que los hacía sentir incómodos”.
La compañía dijo en un comunicado a Fox News el domingo que los empleados violaron una política no escrita de larga data para abstenerse de la política mientras están en el reloj.
“Algunos de nuestros empleados llevan botones que expresan sus opiniones políticas en el trabajo. Si bien Burgerville tenía una política verbal de larga data que prohíbe el uso de botones personales, no teníamos una política escrita sobre esto “, dijo la compañía en el comunicado.
Tal fue el caso de los botones, que Burgerville creó una nueva política en un esfuerzo por crear un “entorno universalmente acogedor e inclusivo”.
“Estamos instituyendo una política uniforme actualizada, y no se permitirán botones ni otros mensajes, tanto políticos como personales. Es una política que es común en las empresas públicas y está alineada con nuestra misión de Servir con Amor “, se lee en el comunicado.
Llueven agresiones
Tras los hechos, los empleados de Burgerville denunciaron haber recibido mensajes de odio y amenazas a través de sus redes sociales.
