Rómulo Avelica-González, un migrante mexicano detenido cuando llevaba a sus hijas a la escuela, será deportado en una horas. Este domingo vence el plazo de su amparo que lo protege de ser deportado.
En febrero pasado, poco después de dejar a su hija de 12 años en el club Boys and Girls de Lincoln Heights, donde se imparten las clases de sexto y séptimo grado, Avelica fue interceptado por dos autos.
Rómulo se dirigía al campus de Academia de Highland Park para dejar a su otra hija, de 13 años, cuando fue arrestado. Desde ese día y hasta ahora estuvo recluido en el centro de detenciones de Adelanto.
“Mi padre estaba muy asustado. No quería detenerse, pero lo hizo. De inmediato, un auto pasó por delante de su camioneta y uno por la parte trasera. Lo sacaron y lo detuvieron. Mi hermana pequeña todavía estaba en el coche, ella tiene 13 años. Mi madre también estaba allí “, dijo Jocelyn Avelica, hija de Rómulo.
De acuerdo con La Opinión, el mexicano fue acusado de llevar una pegatina robada en la placa del carro que manejaba en 1998 y de conducir bajo la influencia del alcohol en 2008. Los abogados de Avelica resolvieron los cargos en junio pasado, pero al parecer eso no fue suficiente para las autoridades migratorias.
La defensa del migrante, quien tiene cuatro hijas nacidas en Estados Unidos, solicitó a la Comisión de Apelación Migratoria que considere reabrir el caso, ya que los cargos fueron resueltos, pero en ese mismo mes fue rechazado.
Los abogados planean presentar otra solicitud de aplazamiento para este lunes 7 de agosto, pero de ser deportado este domingo, será demasiado tarde.
