El Comité Ciudadano del Instituto Nacional de Migración (INM) presentó un resumen ejecutivo del estudio “Personas en detención migratoria en México” en el que hallaron diversas irregularidades en sus visitas a 17 centros de detención migratoria ubicados en todo el país durante el 2016.
Entre éstas hallaron que los agentes del INM hostigan a los migrantes y amenazan con dejarlos sin comer para que firmen su deportación voluntaria a sus países de origen.
México es un país de tránsito para los migrantes que buscan llegar a Estados Unidos para obtener mejores oportunidades de trabajo o los que buscan refugiarse de la violencia que se vive en sus comunidades, principalmente de Guatemala, Honduras y El Salvador.
En su trayecto se encuentran con la violencia que generan las organizaciones del crimen organizado instaladas en territorio mexicano y con los abusos de agentes migratorios que al detenerlos los agreden verbal o físicamente, con el propósito de que sean deportados y no pasen el proceso para buscar asilo, dice el informe.
“En los centros migratorios, son violentados su derechos constantemente, como negarles el acceso a la salud o sus garantías jurídicas”, insiste.
“En todos los centros visitados encontramos que el procedimiento administrativo migratorio está orientado prioritariamente a la deportación o retorno”, dijo Diego Lorente Pérez, director del Centro de Derechos Humanos Fray Matías de Córdova y miembro del comité.
El informe “Migrantes en México”, elaborado por organizaciones de derechos humanos, resolvió que entre 2014 y 2016, el INM deportó a 421 mil 395 migrantes, una cifra que supera casi al doble a las deportaciones tramitadas entre 2011 y 2013, que fueron 213 mil 636.