En Estados Unidos, el crédito se maneja por puntaje. Lo recomendable es que tengas entre 600 y 700 puntos
Como en casi todo, cada estado de Estados Unidos tiene diferentes leyes y normas para comprar una casa. Sin embargo, lo más importante es que tengas acceso a un crédito hipotecario.
Para orientarte, en Conexión Migrante platicamos con César Gamboa, asesor financiero del estado de California, con el fin de darte algunos consejos.
En Estados Unidos, el crédito se maneja por puntaje. Lo recomendable es que tengas entre 600 y 700 puntos.
Para lograr esto, debes tener un buen récord; es decir, la información sobre qué artículos debes o cómo están tus deudas, para ver si tus ingresos coinciden con tus deudas y puedes pagar la hipoteca de tu casa.
Cabe mencionar que el crédito hipotecario para el que apliques también depende del valor de la propiedad que quieres comprar.
Como ya te mencionamos, lo mejor es tener una buena relación entre tus ingresos y tus pagos, pero también puedes considerar:
Como ya sabes, para los bancos es importante que tengas tus ingresos económicos, por lo que es fundamental contar con un número de seguro social; y para tener tu número de seguro social debes ser ciudadano americano.
Por otro lado, si no tienes tu documentación en regla, existen más opciones.
Hay casos de personas que tienen el dinero en efectivo. Migrantes que trabajan toda su vida y guardan sus ahorros.
Si ese es tu caso, solo debes abrir una cuenta en un banco de México para luego transferirlo a una cuenta en Estados Unidos, así tu dinero será validado y podrás realizar la compra de tu casa.
Este método también es usado por turistas e inversionistas que viajan a Estados Unidos.
En ninguna circunstancia utilices un número de seguro social falso; existen casos en los que personas utilizan números ficticios de seguro social con los que llegan a abrir cuentas en el banco e, incluso, sacan créditos.
Ten en cuenta que esto es un fraude federal y que las autoridades correspondientes investigarán el caso.
Esta acción puede llevarte a manchar tu récord e, incluso, a perder tus derechos como ciudadano.
Por su parte, la Oficina para la Protección Financiera del Consumidor también tiene algunas recomendaciones para ti:
Ya sea que obtengas una hipoteca por tu cuenta o con otra persona, los prestamistas no pueden rehusarte crédito, cargarte cuotas o tasas de interés de más, ofrecerte términos desfavorables, ni desalentarte de que solicites un préstamo con base en tu, entre otras razones:
Muchos estados y organizaciones locales ofrecen programas que ayudan a los compradores primerizos con el pago inicial o los costos de cierre. Para encontrar programas cerca de ti:
A veces, el vendedor de una casa le ofrece a un comprador financiarla directamente a través de un “contrato por escrituras” y no a través de un banco u otro prestamista.
No importa cómo se llamen en inglés, esos métodos de financiar casas pueden ser más arriesgados que las hipotecas tradicionales porque no tienen las protecciones que las últimas proporcionan.
Por ejemplo, aunque aparezcas como el dueño de la casa en el contrato por escrituras, realmente no lo serías hasta hacer el último pago y cumplir con todos los requisitos y obligaciones del contrato.
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