Los más de 600 migrantes que fueron deportados de Estados Unidos a México por Ciudad Juárez en los últimos 10 días, no pasaron por filtros sanitarios para detectar coronavirus Covid-19.
A pesar de que estos migrantes deportados se encontraban en centros de detención en Estados Unidos y de venir de zonas de altos contagios de coronavirus, son deportados si protección.
De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Migración (INM) en promedio son deportados a la ciudad entre 60 y 65 connacionales al día.
Arturo Valenzuela Zorrilla, director de la Jurisdicción Sanitaria en la Zona Norte, dijo respecto a la falta de filtros sanitarios en la frontera que:
“Éstos ya se llevan a cabo en albergues de la ciudad y que se instalarán con apoyo de la Comisión Estatal de Seguridad filtros sanitarios en los cruces internacionales”.
Con el propósito de que se pueda detectar a “posibles portadores de coronavirus Covid-19”.
“Se está capacitando gente para poner un operativo en la frontera y prevenir la entrada de casos importados de nuestra vecina ciudad, El Paso”.
“A los compatriotas que han estado llegando de Estados Unidos, que permanezcan en casa, más aún si vienen de lugares con alguna dispersión comunitaria, prevenir y que avisen si tienen síntomas”.
Mexicanos deportados no pasan por filtros; albergues toman precauciones
Ejemplo de que los mexicanos deportados no pasan por filtros sanitarios para detectar el coronavirus Covid-19 es el migrante, “Manuel”, a quien deportaron la semana pasada a Ciudad Juárez.
Él comenta que lo deportaron en la noche, razón por la que le fue difícil encontrar un albergue donde quedarse y quien aseguró no lo revisó ningún médico en ambas fronteras.
“Sólo al llegar a México nos formaron afuera y nos pasaron uno por uno, yo creo para prevenir un contagio”.
“Pero veníamos todos juntos, nos tenían a todos juntos”, dijo el connacional.
Por otro lado, dijo que un grupo de migrantes que fueron deportados la tarde de ayer por esta frontera aseguró que en Estados Unidos sí les hicieron revisión médica.
“Estuve en Midland (Texas), tenía seis meses, pero nada más estuve tres días detenido. En la cárcel ahí me midieron la temperatura y la presión”.
“Y al llegar a El Paso otra vez. Ya aquí nada más cruzamos la frontera (sin revisiones)”, dijo el hombre originario de San Luis Potosí.
Otro de los migrantes deportados comentó que pidió lo llevaran a la Casa de Migrante, sin embargo, agentes del INM le dijeron que ya no había cupo.
Posteriormente al migrante lo llevaron a la Central Camionera, en donde le ofrecieron un 30 por ciento de descuento para que viajara a su lugar de origen.
En tanto, Enrique Valenzuela, coordinador del Consejo Estatal de Población y Migrantes (Coespo), informó ayer que:
“Autoridades están habilitando un espacio para poder aislar a posibles migrantes sospechosos de coronavirus Covid-19”.
Y de esa manera pudieran tenerlos aislados de los demás migrantes deportados.
“Estamos habilitando un espacio para poder recibir de entre los repatriados a los que precisen de albergue. Que sea un espacio donde estén separados del resto”.
Iglesia Católica Mexicana pide al Gobierno Federal generar protocolos eficaces y de prevención hacia migrantes contra coronavirus Covid-19
De acuerdo con el Diario de Juárez, desde mediados de marzo, la Casa del Migrante de Ciudad Juárez mantiene aislados a más de 230 migrantes.
Su director, Francisco Javier Calvillo, informó que:
Ocho de ellos en la Casa de Ejercicios Espirituales, debido a que llegaron de Estados Unidos y ante cualquier riesgo los mantendrán separados del resto.
De acuerdo con el sacerdote, el albergue católico decidió recibir desde hace dos semanas a los migrantes mexicanos deportados de Estados Unidos y a los extranjeros que fueran retornados por el Gobierno estadounidense.
Es gracias al apoyo de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) y donaciones, que los albergues de Ciudad Juárez mantienen:
- La sanitización
- La protección de los migrantes en sus instalaciones
Por otro lado, Comisión Episcopal de Pastoral Social y Movilidad Humana, pidió al Gobierno Federal generar protocolos eficaces y de prevención hacia los migrantes.
“El Covid-19 es un virus que no tiene fronteras ni requiere de visa o pasaporte”.
Sin embargo, el gobierno de Estados Unidos que no cesa las deportaciones, deportará también el coronavirus por la puerta ancha y con el consentimiento del gobierno mexicano”.
“Lamentablemente nos encontramos con una frontera frágil en cuanto a la carencia de controles sanitarios eficientes y permanentes”.
“Una frontera muy vulnerable por la falta de una clara y eficaz política de prevención por parte del gobierno mexicano”, alertó el obispo.
Con información del Diario de Juárez
