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Cuba: playas y pasión

Cuba | Foto: Alexander Kunze
Cuba es un edén de indescriptible belleza, exalta los sentidos, con sus palmeras bajas, la arena blanca, el silencio y el colorido infinito del agua

Fue descubierta en 1492 por Cristóbal Colón y fundada por Diego Velázquez en 1519. Cuba es la mayor isla del archipiélago de las Antillas.

Limita con el estrecho de la Florida y Las Bahamas por el norte, al sur con la isla de Jamaica y el Mar Caribe, al oriente con el Canal de Los Vientos y el Golfo de México al occidente, (desde el Cabo San Antonio hasta el extremo Maisí).

El archipiélago cubano se compone por: la isla de Cuba, la isla de la Juventud y pequeñas islas y cayos.

Su clima subtropical permite disfrutar del mar con muy buenas temperaturas todo el año, (salvo en época de huracanes) la media de 25.5°C es constante.

Junto a la elevada humedad favorecen la exuberancia de la vegetación, que alberga 8 mil especies de plantas, medicinales, decorativas y comestibles.

Dentro de la fauna se hallan peces, moluscos, insectos y aves.

Cuba es una tierra larga y estrecha de variados paisajes, 289 bellísimas playas, con más de 5800 km de costas, superando los 4000 islotes y cayos coralinos, se hallan en ella montañas como la Sierra Madre al este, Sierra Escambray en la región central y la Cordillera de los Órganos al oeste.

En su geografía hay cavernas, mogotes, fértiles valles, llanuras, más de 200 bahías soñadas, indómita naturaleza y manglares.

Alojamiento en Cuba

El Aeropuerto principal de Cuba es el Internacional José Martí, se localiza en el municipio de Boyeros, a 18 km de La Habana.

A él llegan en vuelos a cuba millones de personas de diferentes ciudades del mundo.

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Dotada de hermosura, encanta e invita a volver. Los viajeros que la visitan hallan hospedajes en cuba para todos los gustos, desde sofisticados hoteles en distinguidos barrios hasta sencillas habitaciones en casas familiares. Con todos los atractivos otorgados por la madre naturaleza y la hospitalidad de los cubanos este es un destino para dejarse llevar y disfrutar del vínculo mágico con la tierra y su gente.

La vida de la capital

La Habana | Foto: Augustin de Montesquiou
La Habana | Foto: Augustin de Montesquiou

Su capital, La Habana, guarda secretos que esperan ser descubiertos en el fuerte.

Los palacios, los patios, las celebraciones, las casonas, las murallas, los museos, los espacios verdes y los edificios, como por ejemplo en:

  • La Habana vieja aún conserva su aspecto colonial del siglo XVI en sus angostas calles y edificios.
  • El Palacio real, Fuerte y Museo Marítimo.
  • La ceremonia del cañonazo.
  • El Capitolio Nacional, edificio construido en 1920.
  • La Catedral de San Cristóbal.
  • El Museo Nacional de Bellas Artes.
  • El Museo de la Revolución.
  • La Bodeguita del Medio.
  • Las plazas coloniales: de Armas, de San Francisco de Asís, La Plaza Vieja, de la Catedral, todas rodeadas de construcciones de enorme valor arquitectónico e histórico.

Una experiencia definitivamente inolvidable es pasar el día en Cayo Largo, queda hacia el sur de la isla de Cuba es un edén de indescriptible belleza, exalta los sentidos, con sus palmeras bajas, la arena blanca, el silencio, el colorido infinito del agua, los corales, los peces tropicales.

Las canciones y la cordialidad cubana la convierten en una cautivante aventura para acumular sensaciones e imágenes imborrables.

Los cubanos tienen raíces indígenas, rasgos africanos e influencia española esa fusión les da una impronta propia en las manifestaciones artísticas, los elementos místicos, cultos, el folklore y las comidas. Llevan el ritmo en el cuerpo, por doquier en las empedradas callecitas de la Habana Vieja se suelen escuchar músicos y ver bailarines callejeros que con gracia infinita bailan: salsa, mambos, cha cha y sones envueltos en una gran sonrisa.

La cocina cubana es sabrosa, rica en elementos con aportes de los nativos, conquistadores y otrora esclavos africanos. Usan productos de mar, frescos: pescados, mariscos, cangrejos, acompañados de frijoles y arroz, un buen ron, mojitos con yerba buena y enorme cantidad de frutas están siempre presente, como también los jugos naturales, tropicales, las natillas, boniatillos, flanes, buñuelos, majaretes, fanguitos, etc.

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