Los accidentes viales y los casos donde las personas huían después de chocar en Connecticut han disminuido debido a la política que permite a los migrantes indocumentados obtener licencias de conducir, aseguraron expertos en seguridad.
Connecticut ha visto una reducción del 15% en los choques de fuga en los últimos tres años, lo cual coincide con el tiempo que el estado ha permitido que los migrantes indocumentados conduzcan legalmente.
De acuerdo con los datos estatales obtenidos por el Centro de Informes de Investigación de Nueva Inglaterra, en diez ciudades de Connecticut con la mayor concentración de licencias de manejo para migrantes indocumentados, hubo mil 200 choques menos en los que los involucrados huyen de la escena.
Los migrantes que han obtenido la licencia de conducir aseguran que tenerla les brinda tranquilidad. Expertos consideran que obtener el documento mejora la conciencia vial de los conductores y ésto podía estar haciendo las carreteras de Connecticut más seguras, además un migrante ya no tendría razón para huir del lugar del accidente.
“Se está dando cuenta de que las carreteras son más seguras, y cualquier disminución es algo muy bueno”, asegura Charles Grasso, ex sargento de policía y experto en accidentes automovilísticos en el Centro de Investigación de Seguridad del Transporte de la Universidad de Connecticut.
La ley que permite que los migrantes conduzcan legalmente entró en vigencia en 2015 y permite obtener una licencia marcada con las letras “hacer (do)”. Para obtener la licencia se necesitan documentos para comprobar la identidad y residencia en el estado al menos por 90 días. También tendrán que aprobar pruebas de manejo y verificación de antecedentes penales.
Los titulares de las licencias no pueden usar el documento para pasar por la seguridad del aeropuerto o para colocarse en las listas de votantes, sólo es válida para conducir.
