Los migrantes que entraron con CBP One o con el Parole Humanitario están en la mira de las autoridades de inmigración, pues en su más reciente medida migratoria, el presidente Donald Trump autorizó a los organismos migratorios el revocar su estatus y deportar a las cientos de miles de personas que ingresaron a Estados Unidos bajo la administración Biden, informó CBS News.
¿Qué dice la orden para detener y deportar a migrantes que entraron con CBP One y/o el Parole Humanitario?
Gracias al memorando del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) obtenido por CBS News, esta indicación elimina la protección contra la deportación que tenían estas personas mientras sus casos estuvieran en proceso, como el caso de las personas que solicitaron asilo en Estados Unidos, o mientras sus programas estuvieran activos.
Además, la medida autoriza al Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) a arrestar, detener y deportar de manera acelerada, dependiendo del caso, hasta a 1.5 millones de personas beneficiaras de estos programas.
Si bien estas personas tienen un estatus migratorio regular, pues ingresaron con permiso del gobierno, la administración Trump sostiene que estas personas son migrantes irregulares, pues asegura que esta medida se utilizó de manera indebida.
¿Cómo funcionará el plan para deportar a migrantes que entraron con Biden?
El plan de Trump consiste en que ICE, el Servicio de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) y el Servicio de Ciudadanía e Inmigración (USCIS) eliminen de forma gradual el beneficio conocido como parole, el cual permite el ingreso de extranjeros al país por motivos humanitarios.

Fue a través de la figura del parole como la administración Biden procesó las peticiones de asilo en la frontera sur de Estados Unidos, no obstante, este programa se cerró tan pronto como Donald Trump juramentó como presidente.
Otro uso fue para permitir el ingreso de medio millón de personas originarias de Cuba, Haití, Nicaragua Venezuela siempre y cuando tuvieran a un patrocinador en el país que estuviera dispuesto a cubrir sus necesidades económicas, este programa fue conocido como Parole Humanitario.

La segunda orden amplía el proceso de deportación acelerada, la cual actualmente permite a los funcionarios la CBP deportar a los migrantes que tengan menos de un año en Estados Unidos y que hayan sido detenidos las primeras 100 millas alrededor de las fronteras terrestres.
En este sentido, se busca ampliar la orden de expulsión acelerada a nivel nacional y aplicarla aplicable a los inmigrantes que no pueden demostrar que han estado en Estados Unidos durante más de dos años.
Este tipo de medidas de Trump no nuevas
Durante su primera administración, el presidente Trump destinó varios de los recursos del Servicio de Ciudadanía e Inmigración (USCIS) en crear un equipo para retirar el beneficio de la naturalización a las personas que considerasen la hayan obtenido de forma irregular o a través del fraude. No obstante, además de ser costoso, este programa tuvo pocos resultados y retrasó el procesamiento de varios miles de solicitudes de naturalización.
En cuanto a las deportaciones exprés, en septiembre de 2019 la juez de distrito Ketanji Brown Jackson bloqueó la orden de Trump para ampliar las deportaciones expeditas por violar la ley federal y no implementar la medida con el proceso aecuado.