Los hospitales en Texas ya pueden comenzar a preguntarán a sus pacientes sobre su estatus migratorio y tendrán que registrar los costos de la atención médica de los indocumentados en Estados Unidos.
La nueva medida fue ordenada por el gobernador republicano de Texas, Greg Abbott, y se suma a los desacuerdos de Texas con el gobierno actual de Joe Biden respecto a la política migratoria.
Si bien, la política no exige que los pacientes respondan la pregunta sobre su estatus migratorio, algunos críticos advierten que este cambio provocaría que algunas personas duden en buscar atención en los hospitales en Texas.
Florida ya tiene una regulación similar, impulsada por el gobernador republicano Ron DeSantis, quien comparte una postura crítica frente al manejo de la migración en el gobierno de Biden.
¿Qué pasa si no respondo sobre mi estatus migratorio en los hospitales en Texas?
El decreto emitido por Abbott en agosto, dice que los hospitales deben preguntar a cada paciente si es ciudadano estadounidense o si tiene papeles para estar en el país.
Sin embargo, los pacientes no están obligados a responder, y el personal médico debe recordarles que su respuesta no afectará el acceso a la atención, conforme a lo establecido por la ley federal.
Los hospitales en Texas tendrán que enviar esta información al estado hasta marzo y el primer informe anual se presentará en 2026.
Además, en los informes registrarán los costos para quienes están cubiertos por programas como Medicaid o el seguro médico infantil CHIP, así como para quienes carecen de cobertura.
Al anunciar esta política, Abbott señaló que “los texanos no deberían cargar con el costo de la atención médica para quienes están en el país ilegalmente.”
Texas seguirá el ejemplo de Florida
Al anunciar la nueva medida de los hospitales en Texas, Abbott señaló que “los texanos no deberían cargar con el costo de la atención médica para quienes están en el país ilegalmente.”
Texas no es el primer estado en implementar este tipo de medidas. En Florida, una ley similar entró en vigor el año pasado.
Los defensores de la atención médica en ese estado han comentado que dicha ley ha generado temor en la comunidad inmigrante, reduciendo las visitas de personas indocumentadas a hospitales, incluso para emergencias.
Un informe estatal muestra que entre junio y diciembre de 2023, aproximadamente el 8% de los pacientes admitidos en hospitales y el 7% de quienes visitaron urgencias en Florida optaron por no responder sobre su estatus migratorio. Menos del 1% de los pacientes informó estar en el país sin autorización.