Durante el mes de noviembre Baja California registró la llegada de al menos, 10 mil migrantes amparados para tener libre tránsito en México.
Para el delegado del Instituto Nacional de Migración (INM) en la entidad, David Pérez Tejada, esto contribuyó al incremento en cruces irregulares.
El funcionario refirió que Asia y Sudamérica son los principales lugares de donde provienen las personas portadoras de estos documentos.
Como autoridad “Nos tienen maniatados”
Pérez Tejada afirmó que la circulación de los amparos se ha convertido en una forma de evadir a las autoridades nacionales.
De igual forma reiteró que la finalidad de quienes obtienen el amparo es el cruzar de forma irregular a Estados Unidos.
“Llegan con este amparo y ¿qué provoca? Darles libre tránsito y que no se les haga nada… Al final del día nos tienen maniatados”.
Mexicanos se aprovechan de los migrantes amparados
Respecto a la forma en la que es adquirida la documentación, destacó que hay despachos mexicanos lucrando con la situación.
Explicó que el amparo es un instrumento jurídico que adquieren desde su lugar de origen y tiene un precio de entre 500 y 2 mil dólares.
“Se están aprovechando de la situación de la gente, no son particularmente de Baja California, se promueven en Veracruz, Tabasco y otros estados”, comentó.
Los cruces irregulares no cesan
De acuerdo a lo declarado por Pérez Tejada, en la Zona Norte de Tijuana la cantidad de cruces irregulares ha disminuido a solo 100 diarios.
En tanto, son aproximadamente 800 personas las que cruzan de forma irregular diariamente por el área de Jacumé, en el desierto de Tecate.
Pérez Tejada habló de un incremento general en el flujo migratorio y que los intentos de cruce se siguen registrando incluso por el mar.
“Hay de dos a tres casos diarios de incidentes en el mar de gente que intenta por cualquier vía cruzar a Estados Unidos”, dijo.
Ante la situación, el delegado del INM en Baja California hizo un exhorto a la comunidad en tránsito a no arriesgar su vida.
Reiteró que la forma más segura para tratar de cruzar a Estados Unidos es bajo el protocolo de la aplicación CBP-One.