Para cerrar el paso a los miles de migrantes que llegan a la frontera, México desplegó un operativo a cargo del Instituto Nacional de Migración (INM), la policía municipal y la Guardia Nacional, y no solo eso, las autoridades montaron un “muro humano”, mismo que migrantes trataron de esquivar.
Los migrantes pasaron la noche, ahí entre el río Bravo y el alambrado instalado por la Guardia Nacional de Texas.
Todos esperando que al día siguiente (hoy) lograran cruzar hacia Estados Unidos.
Muchos de ellos llegaron a pie, otros a bordo de la bestia, y no solo arribaron hombres.
Entre la multitud de migrantes también se observan mujeres, niños, niñas, adolescentes y hasta bebes.
Todos ellos arriesgando su vida, con tal de poder cruzar hacia Estados Unidos.
Algunos continuando su camino “ilegal”, deseando no ser detenidos y deportados.
Otros más pensando en entregarse a las autoridades estadounidenses con el objetivo de poder solicitar asilo en EEUU.
Un muro humano que no contiene a los 16 mil migrantes que llegan a diario
México ha registrado un total de 16 mil migrantes que llegan diariamente a la frontera norte.
Situación que como había señalado la Organización Internacional de las Migraciones (OIM), solo refleja el “aumento sin precedentes de personas migrantes en Centroamérica y México”.
A la par de que los migrantes se quejan de que las autoridades mexicanas los tratan mal, muchos tienen miedo, miedo a ser detenidos y deportados.
También mencionan que cruzar por México ha sido lo más difícil de vencer durante su travesía.