En el Día Internacional de las Víctimas de Desapariciones Forzadas decimos los estados con más migrantes desaparecidos en México.
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) aprobó la convención internacional para la protección de las personas contra las desapariciones forzadas ante el aumento de casos y declaró el 30 de agosto como el día internacional de personas desaparecidas.
En primer lugar, debes saber que las detenciones y secuestros también son una forma de desaparición forzada.
Las personas que viven directamente estas situaciones no son las únicas víctimas, sus familiares también son afectados por el hostigamiento e intimidación de quienes llevan a cabo este delito.
En su trayecto por México, los migrantes se enfrentan a un contexto violento e inseguro.
Además, expertos señalan que el crimen organizado es uno de los factores que más afecta a los migrantes.
En México, las desapariciones son realizadas principalmente por los cárteles, las personas migrantes pueden ser víctimas de secuestro y pueden ser reclutados forzosamente en estos grupos.
“Es un triángulo del terror migrante, porque van a bordo de vehículos o caminando y a cada rato los van extorsionando o los cambian de ubicación, y después desaparecen”.
-Rubén Ortega, integrante del Observatorio de Seguridad y Justicia de la Universidad de Guadalajara.
¿Cuáles son los estados con más migrantes desaparecidos en México?
De acuerdo con la Comisión Nacional de Búsqueda (CNB), en México del 1 de enero del 2019 al 10 de abril del 2023 se registraron 810 desapariciones de personas extranjeras provenientes de Centroamérica y Sudamérica.
- Coahuila es el estado con más migrantes desaparecidos en México, se registraron 125 personas
- Chiapas con 57
- Veracruz con 56
- Tabasco con 56
- Tamaulipas con 55
- Chihuahua con 46
Luego de estos estados siguen:
- Nuevo León con 38 personas
- Jalisco con
- Sonora con 31
Niños migrantes no acompañados
En una entrevista para Conexión Migrante, Moncerrat Ramírez nos comenta cómo fue cruzar la frontera cuando tenía apenas 13 años de edad.
“Me sentí como una mercancía en el trayecto”.
La mamá de Moncerrat dejo Guerrero para ir a Estados Unidos a buscar mejores condiciones de vida.
Luego de tres años en Estados Unidos, le dijo a sus hijos que debían cruzar la frontera para poder reencontrarse.
En el camino, Moncerrat fue separada de su hermano, ella llegó a una casa de seguridad en Tijuana.
“Era una casa muy grande con muchas habitaciones y tenían varios autos”.
Después de un intento fallido de cruzar en un auto, Moncerrat intentó cruzar por el desierto con un grupo de migrantes durante la noche.
“Cruzar por el desierto es peligroso, en el camino había cerros y otros obstáculos, me lastimé y un paisano me ánimo a seguir en el camino”.
Los peligros del desierto
Los migrantes solo llevaban sándwiches para comer en el camino y contaban con poca agua.
Moncerrat comenta que un paisano originario del mismo pueblo le otorgó ayuda cuando ella estaba pensando en quedarse en el camino para no atrasar a los demás.
Posteriormente, logró cruzar el alambre de púas y pasar al otro lado. Finalmente, Moncerrat fue entregada a sus familiares.
Afortunadamente, ella pudo reencontrarse con su mamá. Sin embargo, su experiencia nos deja saber un poco de los riesgos que enfrentan los niños migrantes no acompañados en su trayecto.
Con información de El Universal.