A dos meses del tiroteo en la escuela primaria en Uvalde, Texas, hubo renuncias, miedos, fallas y muertes, entre otras consecuencias
A dos meses del tiroteo en Uvalde, Texas, en la escuela primaria Robb, familiares de las 21 víctimas y de los sobrevivientes exigen justicia.
En estos dos meses, los familiares de las víctimas de Uvalde, Texas, se reunieron en juntas de concilio y del Distrito Escolar Independiente de Uvalde. También viajaron a Washington D.C. para ser testigos de las audiencias del comité especial que investiga el tiroteo.
Suspendieron a Pete Arredondo, jefe de policía del Distrito Escolar Independiente Consolidado de Uvalde, debido a la falta de claridad de su acción durante el tiroteo.
Pete Arredondo renunció a su puesto en el concejo de la ciudad. El 7 de mayo, lo eligieron para el puesto del concejo del Distrito 3 y asumió su cargo el 31 de mayo, días después del tiroteo de Uvalde.
La escuela primaria Robb se cerró desde el tiroteo. Además, será demolida y reconstruida, pero el proyecto de reconstrucción está en sus etapas iniciales.
Cuando el atacante iba a entrar al salón, el maestro Arnulfo Reyes les dijo a sus estudiantes que se durmieran para que no vieran nada. El tirador le disparó
al maestro y le tiró agua por encima para asegurarse que estaba muerto.La abuela del tirador de Uvalde, Celia Martínez González, salió del Hospital Universitario en San Antonio después de que su nieto la baleara.
En redes circula un video donde se ve cómo los oficiales no actúan durante el tiroteo.
El primer informe oficial con los resultados de la investigación del tiroteo arrojó “fallas sistémicas y una toma de decisiones extremadamente pobre” por parte de las autoridades. Además, 376 elementos de varias agencias llegaron a la escuela durante el ataque.
Las imágenes de las cámaras corporales de los agentes que respondieron al tiroteo masivo mostraron a oficiales rondando el campus sin actuar. En los videos se escucha cómo los agentes no saben si el atacante estaba en el salón de clases o no.
Los familiares de los sobrevivientes se negaron a que sus hijos regresen a clases en la escuela donde murieron 21 personas. Quieren posponer el regreso a clases para el 8 de septiembre.
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