En un comunicado publicado por las organizaciones: Las Vanders, Red Regional de Familias Migrantes, Inmovilidad de las Américas y Clínica Jurídica para Personas Refugiadas “Alaíde Foppa”, el pasado 1ero de julio, se exige a las instituciones correspondientes de México a corregir la situación de maltrato que viven los migrantes en la caravana que salió el viernes pasado desde Tapachula, Chiapas.
La caravana que está cruzando por el sur de México es de alrededor de 5 mil personas, entre ellos aproximadamente 700 niños y 200 mujeres embarazadas.
Está conformada por migrantes que vienen desde Venezuela, Ecuador, Colombia y otros países de Centroamérica. Llegaron a Huixtla, Chiapas el 1ero de julio entre las 4:00 pm y las 10:00 pm.
El Instituto Nacional de Migración pidió a los migrantes sus documentos de identificación para generar las tarjetas de visitante por razones humanitarias. Al momento no se han regresado los documentos ni se han entregado tarjetas.
Los participantes de la caravana reportan a través del comunicado que hay operativos para impedir que los migrantes reciban ayuda.
Indican que los operativos son de la Guardia Nacional, el INM y el ejército. Los migrantes no han recibido apoyo de transporte, agua ni atención médica. El clima de altas temperaturas no mejora la situación y reportan niños con deshidratación.
“Las instituciones nos humillan y maltratan por el simple hecho de ser migrantes”, dijo Mariana Ramírez, migrante de 30 años.
Las organizaciones firmantes del comunicado piden apoyo para estabilizar el bienestar de los migrantes, darles un trato digno, atención médica, además de información verídica y oportuna sobre la situación de la caravana.