27 de marzo de 2024
DOLAR: $16.64
Search
Close this search box.
27 de marzo de 2024 | Dolar:$16.64

Así puedes preparar a tus hijos para recibir la Eucaristía

Foto: Thays Orrico / Unsplash
Los niños no pueden ser admitidos a la Sagrada Eucaristía hasta que hayan alcanzado la edad del discernimiento, es decir diferenciar la Eucarestía de un pan ordinario | Con información de ACI Prensa

Debido a la pandemia y las restricciones sanitarias, muchos niños han interrumpido su preparación para la Primera comunión y no han podido recibir la Eucaristía.

Ante esta situación ACI prensa recopiló en su Enciclopedia Católica las “Instrucciones generales en forma de Catecismo”, libro para la formación eucarística de los niños”.

Tal vez te interese:  San Manuel González García, el "apóstol de la Eucaristía"
Tal vez te interese:  ¿Sabías que cada día de la semana tiene un propósito de fe?

La ventaja de este antiguo catecismo es que explica en lenguaje sencillo todo lo necesario para aproximarse debidamente y amar el Misterio Eucarístico.

¿Por qué los niños deben hacer la primera comunión?

De acuerdo con la Iglesia Católica, los niños no pueden ser admitidos a la Sagrada Eucaristía hasta que hayan alcanzado la edad del discernimiento. Una vez que lleguen a la edad del uso de la razón los jóvenes pueden recibir el sacramento.

Es por ello que no hay una edad para iniciar el Catecismo, pues con edad del discernimiento la iglesia se refiere al desarrollo mental. Los niños deben ser capaces de discernir la Eucaristía y el pan ordinario.

De Lugo dice que si se observa que los niños asisten a Misa con devoción y atención, esto es un signo de que han llegado al uso de razón. Por otra parte, se está de acuerdo en que los niños en peligro de muerte deberían ser admitidos a la Comunión aunque puedan no tener el mismo grado de preparación que podría pedirse en circunstancias ordinarias.

Finalmente, En relación con la Primera Comunión puede observarse:

  1. Que debe tener lugar durante el tiempo pascual;
  2. Que debe recibirse, como norma, en la iglesia parroquial, a menos que se tenga el consentimiento del pastor, para recibirla en otro lugar.
  3. No debe ahorrarse ningún esfuerzo para que la ocasión quede fijada de forma indeleble en la mente del joven comulgante; y
  4. Que a este propósito la Misa en que se la recibe debería celebrarse con especial solemnidad estando niños y niñas ataviados de la mejor manera y colocados en la iglesia en lugares destacados.

 

Notas relacionadas