Este lunes, el gobierno de Estados Unidos reactivó el programa de Protocolos de Protección a Migrantes (MPP), conocido como “Quédate en México”, pese a la oposición de políticos, activistas y organizaciones. Una de ellas, la organización Human Rights Watch (HRW) calificó la decisión de Estados Unidos como una “aberración”.
Según el organismo, Quédate en México sólo expone a los solicitantes de asilo “a riesgos de secuestro, extorsión, violación sexual y otros abusos”.
Además, dice la organización, el programa viola el derecho de esas personas a solicitar asilo en Estados Unidos. Así lo declaró por medio de un comunicado de prensa compartido a través de Twitter.
EE. UU. y México: Reanudar “Quédate en México” es una aberración https://t.co/dAm9DTebtC
— Human Rights Watch (@hrw_espanol) December 9, 2021
“Si bien el programa ha sido modificado por la administración Biden, hay pocas razones para creer que las agencias gubernamentales responsables de implementar el Quédate en México puedan hacerlo de un modo que respete los derechos humanos”, señaló Human Rights Watch.
Quédate en México
Luego de darse a conocer la reactivación de Quédate en México, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) aseguró que implementaría cambios en el programa. Entre estos cambios se encuentran:
- Ofrecer refugios y transporte seguro a los solicitantes de asilo en el proceso.
- Agilizar el procesamiento de las solicitudes y responder cada caso en, máximo, seis meses desde que un migrante ingresa a México.
Sin embargo, otra de las modificaciones hechas es la inclusión de inmigrantes haitianos y otras nacionalidades que anteriormente no formaban parte de este programa.
A inicios de semana, Jen Psaki, portavoz de la Casa Blanca, aseguró que los cambios se hicieron con el propósito de mejorar el trato humanitario a los migrantes. No obstante, agregó que Quédate en México “sigue siendo ineficiente e inhumano“.
Ari Sawyer, investigadora fronteriza en HRW, recalcó que no hay forma de que un programa diseñado para retrasar el proceso de asilo y poner a las personas a esperar en sitios peligrosos pueda operar de modo que respeten sus derechos. “Los gobiernos de Estados Unidos y de México deberían dar marcha atrás de inmediato”, pidió.