En materia de inmigración, Donald Trump extendió hasta el 31 de marzo de 2021 dos decretos que suspenden la entrada a Estados Unidos de muchos solicitantes de residencia permanente y otros trabajos temporales.
El jueves 31 de diciembre de 2020, se vencían estas medidas. El pasado abril y junio, Trump argumentó que la destrucción de empleos provocada por la crisis del coronavirus necesitaba nuevas restricciones migratorias.
“Los efectos del Covid-19 en el mercado laboral de Estados Unidos y en la salud de las comunidades estadounidenses son asuntos que siguen siendo preocupantes”, escribió Trump en una proclamación presidencial.
El presidente electo Joe Biden llegará al poder el próximo 20 de enero. Por lo que tendrá el poder de eliminar esos vetos. Sin embargo, no ha aclarado si lo hará o no.
¿Cuáles son los vetos que Trump extendió en la suspensión parcial de inmigración a EEUU?
El primero de los vetos, emitido en abril, suspendía la emisión en el extranjero de residencia permanente, también conocidos como Green Cards o tarjetas verdes. Este veto impidió la reunificación familiar de los ciudadanos estadounidenses de origen extranjero o residentes permanentes en el país.
Bajo este veto, solamente los esposos extranjeros de ciudadanos estadounidenses o sus hijos menores de 21 años pueden acceder a un permiso de residencia permanente. Esto excluye a progenitores, hermanos o hijos de otra edad. Además de a los cónyuges o hijos de residentes permanentes.
El segundo veto se emitió en junio. Iba más allá y congelaba la emisión de nuevos visados de los tipos H-1B, los cuales son diseñados para ciertos trabajadores calificados como los empleados en la industria tecnológica. El H-4 que es para las parejas de estos empleados. Los visados L-1 que están destinados a directivos que trabajan para grandes corporaciones.
Esta prohibición también afecta a los permisos de empleo H-2B para los trabajadores de los sectores hoteleros y de construcción. Así como los J-1 que son para investigadores y profesores de investigación y otros programas de intercambio de trabajo como para becas o niñeras.
Las empresas denunciaron que ese veto puede ralentizar la recuperación de la economía del país. Sin embargo, Trump mantiene que es indispensable para asegurar que los empleos existentes van a parar a estadounidenses.
Con información de EFE.
