En tan sólo tres días, el estado de Florida ha registrado más de 25 mil nuevos casos de coronavirus. Las autoridades sanitarias advierten que no son optimistas al respecto: aseguran que los números seguirán subiendo en los próximos días.
Las razones de esta tendencia radican en la relajación de las normas, la reapertura de negocios y, en muchos casos, el incumplimiento de las medidas de distanciamiento social y del uso de cubrebocas.
A eso se le suman las protestas en la ciudad por la muerte de George Floyd. En ellas, cientos de personas no usaron mascarillas y no tuvieron en cuenta las medidas implantadas por los gobiernos.
Hasta el domingo por la noche, el número total de contagios en todo el estado era de 141 mil 75. La situación es más preocupante en el sur de Florida. Ahí, el condado de Miami-Dade encabeza el número de positivos con 33 mil 714. En Broward son 14 mil 620, y en Palm Beach, 13 mil 389.
Los “puntos calientes” de Miami
Miami es la ciudad donde están puestas todas las miradas. En una conferencia de prensa el miércoles pasado, el alcalde Francis Suárez anunció que tres áreas de su ciudad estaban registrando un gran número de contagios. Estas áreas son las que tienen los códigos ZIP 33125, 33126 y 33142.
Suárez también admitió su preocupación por el alto número de casos positivos, aunque aún no se había alcanzado el máximo diario. Hasta el momento, ese máximo ha sido de 9 mil 585 casos.
El mismo alcalde indicó a Voz de América que esos “puntos calientes” son zonas donde vive una gran población hispana de bajos recursos. A este sector de la población se le hace “prácticamente imposible” comprar unas mascarillas como medida de protección.
Tal es el caso del cubano Tomás Chávez. Chávez estaba haciendo fila en el barrio de la Pequeña Habana para que le entregaran un paquete de mascarillas. Lleva más de tres meses sin trabajar desde que comenzó la crisis sanitaria. Explicó a VOA que prácticamente no tiene dinero para comprar comida. Como era de esperarse, mucho menos tiene para adquirir uno de esos productos exigidos por las autoridades:
Claro que hay necesidad porque la gente como yo, que lleva varios meses sin trabajar, no tiene para comprar. Además, ya he hecho cinco solicitudes (de compensación por desempleo) y no he visto ni un centavo. Claro que tengo que venir aquí a hacer la cola.
Today we went to one of Miami’s Covid hotspots in the Allapattah neighborhood to distribute roughly 10k masks! Thank you to everyone who came for showing you’re willing to do what it takes to slow the spread. pic.twitter.com/txwQDUHpXF
— Mayor Francis Suarez (@FrancisSuarez) June 23, 2020
Multas si no se lleva mascarilla
Ante el aumento de casos, el ayuntamiento de la ciudad se ha visto obligado a impulsar un proyecto para distribuir mascarillas en las zonas de mayor contagio. Con esta medida esperan evitar la propagación de coronavirus en Florida.
Además, el alcalde anunció el uso obligatorio de tapabocas en cualquier lugar público de la ciudad de Miami. La medida se extiende a otros lugares del condado de Miami-Dade, como Aventura, Hialeah y North Miami. Si los residentes o visitantes no cumplen con las medidas, se podrían enfrentar a sanciones de hasta 500 dólares.
Suárez detalló: “La Comisión de Miami aprobó una ordenanza para multar a las personas que no llevan una máscara en público. La primera vez va a ser una advertencia. Después va a ser una multa de 50 dólares. La segunda va a ser una multa de 150 dólares, y la tercera infracción, de 500 dólares”.
Agregó que si se agotan todas esas posibilidades, una persona podría ir, incluso, a la cárcel.
Maritza Sánchez, originario de Honduras, pero residente en Miami desde hace más de una década, confesó que “la comunidad está necesitada” de este tipo de productos. Hizo énfasis en el alto costo que supone destinar una parte de sus ganancias a la adquisición de guantes, mascarillas y gel desinfectante:
Las primeras (mascarillas) me han costado entre 2 y 3 dólares y son desechables. Algunas las he lavado, pero no sirven una vez que las lavas. La verdad es que ahora estoy preocupada porque esto está cogiendo fuerza.
Una reapertura apresurada
Las autoridades sanitarias y los funcionarios del gobierno habían alertado a la población sobre la posibilidad de un rebrote tras la reapertura de negocios y la adaptación a una “nueva normalidad”. Sin embargo, muchos creen que ese proceso se ha hecho “demasiado rápido”. Critican que “ha importado más la economía”.
Marta Sánchez, quien acompañó a su madre a recoger paquetes de mascarillas, opina al respecto:
Creo que se ha hecho muy rápido. A los políticos les interesaba abrir por una cuestión económica y no de salud. Han priorizado a la economía.
Por su parte, los gobiernos de la ciudad y del condado se escudan en que los “expertos sanitarios” del estado de Florida y de algunas instituciones (como la Universidad de Miami o la Universidad Internacional de Florida) han respaldado la iniciativa de reabrir la economía con ciertas condiciones.
Temor al cierre de negocios en Florida
Con todo, las administraciones han tenido que poner pausa al proceso de reapertura. Mientras tanto, el gobernador de Florida, Ron DeSantis, ha endurecido algunas medidas.
El viernes, en una comparecencia pública, anunció que los bares no podrán servir alcohol hasta nuevo aviso. El objetivo es evitar las aglomeraciones en estos locales.
Los restaurantes, sin embargo, sí podrán servir licores siempre y cuando se esté comiendo en el lugar. De lo contrario, también está prohibido.
Alejandro De Arruabarrena, dueño de un restaurante en la ciudad, teme que las autoridades den un paso atrás ante el aumento drástico de contagios. Tiene miedo de que las autoridades vuelvan a ordenar el cierre de restaurantes y otros negocios no esenciales. Considera que esto sería un golpe “muy duro” a la economía:
Si no tenemos la conciencia de que todos juntos podemos vencer, obviamente todos vamos a ser afectados. Que volvamos a una etapa de cierre va a ser bastante traumático, más de lo que es en este momento..
La situación general en Estados Unidos
Según el Departamento de Salud de Estados Unidos, ya hay más de dos millones y medio de infectados por el nuevo coronavirus en toda la nación. En las últimas 24 horas se han reportado 40 mil 587 nuevos casos.
Además de Florida, Texas (153 mil 175 contagios) y Arizona (73 mil 908 contagios) también se perfilan como los nuevos epicentros de la pandemia en el país por el creciente número de casos en los últimos días, según cifras de la Universidad Johns Hopkins.
