La contienda por la nominación presidencial demócrata se redujo este supermartes a Joe Biden y Bernie Sanders.
Después de una votación primaria en 14 estados que animó una carrera que hasta la fecha parecía letárgica.
El mayor ganador del supermartes fue el ex vicepresidente Biden, que se llevó nueve estados, entre ellos Texas.
El senador Sanders conquistó el estado con mayor número de delegados, California, además de Colorado, Utah y Vermont, al que representa en el Congreso.
Biden arrasó en los estados del sur, con victorias en Arkansas,Alabama, Carolina del Norte, Massachusetts, Minnesota, Oklahoma, Tennessee y Virginia.
Aún no estaba decidido el estado de Maine, donde Biden y Sanders luchaban codo a codo en una batalla muy cerrada.
Las victorias de Biden, tres días después de su resonante triunfo en Carolina del Sur y que incluyeron un abrumador apoyo de los votantes afroamericanos, inyectó nueva fortaleza en la contienda para oponerse a Trump en las elecciones presidenciales de noviembre.
Su campaña no había repuntado después de un cuarto lugar en Iowa, un quinto en New Hampshire y un distante segundo en Nevada. Pero se sumó el apoyo de los precandidatos Pete Buttigieg, Amy Klobuchar y Beto O’Rourque, quienes ya se habían retirado de la contienda.
“Estoy aquí para reportar que estamos muy vivos. Y no se confundan, esta campaña obligará a Donald Trump a hacer sus maletas”, dijo Biden el martes por la noche desde su sede de campaña en California.
“Es una buena noche”, dijo Biden. “Y parece que está mejorando”.
